Animales marinos: descubre cómo son, su medio ambiente y sus características más sorprendentes

El fascinante mundo de los animales marinos

Cuando hablamos de la biodiversidad de nuestro planeta, muchas veces solemos quedarnos en la superficie. Con esto no hablamos solo de forma metafórica, sino que literalmente nos solemos quedar en la superficie de nuestro planeta, en tierra firme.

Cualquier niño sabe qué son las jirafas, los elefantes, los monos o incluso algunas especies concretas de pájaros y plantas. Pero todo lo que se esconde bajo el mar suele sernos un misterio, al menos para la gran mayoría de nosotros.

Sin embargo, es en zonas donde no podemos mirar directamente donde se encuentran regiones preciosas y valiosas de nuestro planeta, como las praderas oceánicas, los verdaderos pulmones del planeta, o los increíbles paisajes de las barreras de coral.

¿Por qué la vida submarina es tan diferente y desconocida?

¿Cómo es el medio marino?

Antes de nada, debemos entender que el medio marino y terrestre tienen considerables diferencias que explican por qué la vida se ha adaptado de forma tan distinta a un medio y al otro.

La principal diferencia es la más evidente: el medio marino es un medio acuático. Esta no es ninguna nimiedad, ya que debido a la abundancia del agua (salada si nos estamos refiriendo a mares y océanos) los animales acuáticos se han tenido que adaptar de manera muy distinta a como lo harían en tierra firme.

Por ejemplo, como pueden hidratarse mucho más fácilmente, no han necesitado desarrollar unos tejidos específicos para protegerse de la desecación, como en el caso de las escamas de los reptiles o la piel de los mamíferos.

Mientras que en tierra firme los animales necesitan consumir el oxígeno atmosférico, los animales acuáticos, en la mayoría de las ocasiones, consumen este oxígeno disuelto en el agua, lo que ha motivado la aparición de estructuras como los pulmones en el primer caso y de branquias en el segundo.

Añadido a esto, los animales acuáticos, en su mayoría, se pueden desplazar tanto vertical como horizontalmente, algo que en el medio terrestre queda reservado únicamente para las especies voladoras.

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, ya que este medio acuático es más denso que el aire, lo que significa que los animales acuáticos deben vencer una mayor resistencia a la hora de desplazarse.

En el medio terrestre los recursos que suelen limitar las cadenas tróficas están relacionados con la disponibilidad hídrica y de nutrientes, mientras que en el medio acuático estas limitaciones siguen estando relacionados con los nutrientes, pero también con la disponibilidad lumínica, en lugar de con el agua.

Como fruto de este fenómeno, para entender mejor como es un ecosistema marino, debemos pensar en una distribución vertical, más que horizontal, donde existe una gran diferencia entre las aguas más superficiales y profundas.

Las capas más superficiales son las más cálidas, luminosas, oxigenadas y vivas, mientras que las más profundas están caracterizadas por ser ricas en nutrientes (que se suelen acumular entre ellas) pero frías y pobres en luz, por lo que suelen estar habitadas por organismos descomponedores, zooplancton y ciertos animales marinos, pero no por organismos fotosintéticos.

En el ecosistema marino nunca llueve a gusto de todos, por lo que la mayor biodiversidad suele acumularse en zonas intermedias, donde hay una temperatura, cantidad lumínica y de nutrientes razonables para que la fotosíntesis pueda llevarse a cabo y con ella la producción primaria que vertebra a toda la red trófica.

Al igual que en los ecosistemas terrestres, los ecosistemas marinos son muy heterogéneos y presentan características distintas desde los polos al trópico, por lo que es muy difícil hablar de generalidades más allá de las principales características.

¿Cómo son los animales marinos?

Cómo ya imaginarás, lo que ha determinado cómo son los animales marinos ha sido, principalmente, el agua.

La diversidad marina es muy abundante, por lo que te hablaremos brevemente de ello en el siguiente apartado. Sin embargo, si hay algo que se suele repetir, como si fuera un patrón de la naturaleza, sobre todo en peces, tiburones y resto de animales nadadores, es una forma corporal concreta.

Antes de que te hable de ello, trata de imaginar en tu cabeza un pez inespecífico, uno que no exista. ¿Te das cuenta de esa característica "forma de pez"? Se trata de una forma llamada fusiforme (o torpedo, entre nosotros).

Esta forma no sigue ningún plan divino, sino que es la mejor forma que la evolución ha encontrado para favorecer el desplazamiento por este denso medio acuático, ya que les permite reducir la resistencia del agua al nadar. Sin embargo, esta forma no es igual en todos los animales marinos, porque en función de sus hábitos tróficos existen ciertas modificaciones.

Por ejemplo, los peces depredadores suelen tener cuerpos más alargados y, por tanto, aerodinámicos, por lo que pueden desplazarse a velocidades realmente sorprendentes para poder cazar a sus presas.

Por otro lado, los peces herbívoros suelen tener cuerpos más cortos y redondeados para poder maniobrar entre las plantas acuáticas. Destacan algunos casos muy interesantes, como los miembros del orden Pleuronectiformes, que están caracterizados por vivir en los fondos marinos, completamente tumbados y pegados al suelo.

Su forma completamente plana no parecería muy interesante si no supierais que sus ancestros eran peces fusiformes y simétricos (con la típica forma de pez) y que la evolución ha ido moldeando hasta su forma actual. ¡Vaya cambio!

Como consecuencia de esto, lo más destacable es que uno de sus ojos ha ido migrando hacia el otro lado de su cabeza, por lo que aquel lado que está contra el suelo carece de ningún ojo, mientras que en el otro existen dos ¿No es sorprendente la naturaleza?

Otra característica que suele ser común a los animales marinos es el uso de branquias para respirar. Aunque existen excepciones muy importantes, como los mamíferos marinos o las tortugas, la mayoría de las peces y tiburones tienen este mecanismo para respirar.

Las branquias están compuestas por láminas muy finas que están rodeados por una gran red de vasos sanguíneos. El agua fluye a través de estas láminas o filamentos, y las moléculas de oxígeno disueltas en el agua pasan a través de las membranas de las branquias y entran en la corriente sanguínea mediante difusión, mientras que el dióxido de carbono se difunde desde la sangre hacia el agua y es eliminado del organismo.

Para que esta agua pueda fluir por las branquias es necesario que exista un movimiento continuo del animal, por lo que no pueden estar parados, no por mucho tiempo, si carecen de algún mecanismo que permita esta circulación de manera activa.

Por cierto: en ese ambiente tan diferente, ¿te has preguntado alguna vez cómo duermen los peces? Te lo contamos en ese artículo 😉.

¿Qué tipos de animales marinos existen?

Existe una gran diversidad animal, pero podemos distinguir algunos conocidos grupos:

Peces

Este inmenso grupo contiene miembros que pueden variar en tamaño, pero están caracterizados por tener escamas, aletas, que les permiten desplazarse y branquias, que les permiten respirar bajo el agua. Son de ectotermos (de sangre fría) y por este motivo no pueden regular su temperatura corporal, además de que suelen formar grandes grupos en forma de bancos de peces.

Como curiosidad, en zoología no existe un grupo "peces", sino que este es un término coloquial que hace referencia a varios grupos distintos.

Mamíferos y reptiles marinos

El primer grupo incluye ballenas, delfines, focas, leones marinos, morsas... mientras que el segundo está caracterizado principalmente por las tortugas marinas.

Son animales cuyos ancestros aparecieron en el medio terrestre, pero que han ido evolucionando para vivir en el agua. Por este motivo carecen de escamas y tienen pulmones, por lo que deben salir a la superficie para respirar.

Destacan por tener un comportamiento social avanzado en el caso de los mamíferos marinos, como los cetáceos.

Invertebrados marinos

Los invertebrados marinos son una categoría amplia que incluye una gran variedad de organismos, como corales, medusas, pulpos, calamares, estrellas de mar, erizos de mar y muchos más.

Suelen ser los grandes olvidados de la vida submarina, pero representan un porcentaje importante de la biodiversidad y sus formas y hábitos de vida son muy interesantes.

Moluscos marinos

Los moluscos marinos son un grupo diverso que incluye animales como los caracoles marinos, los calamares, los mejillones, las almejas y las ostras.

Muchos de ellos son consumidos por nuestra especie y suelen estar caracterizados por tener conchas que los protegen y que solemos recoger en nuestros paseos por la playa. ¿Sabías que también contribuyen a la formación de la arena que pisamos? ¡Están en todos lados y no solemos darnos cuenta!

¿Cuáles son los animales marinos más raros del mundo?

Si existe alguna región del planeta cuyos animales aún puedan verdaderamente sorprendernos por sus curiosidades, esta es, sin duda, el fondo marino. Aunque existen miles de ejemplos que nos podrían sorprender y que dan para un artículo concreto, hoy os traigo dos con algo en común: una curiosa reproducción.

Caballitos de mar

Los caballitos de mar (género Hippocampus) tienen una forma distintiva que se asemeja a un caballo, de ahí su nombre. Tienen un cuerpo alargado y delgado, con una cabeza en forma de caballo y un cuello largo, midiendo en total entre 2 y 15 centímetros de largo.

Su piel está cubierta de pequeñas escamas óseas, y pueden tener colores que van desde el amarillo y el naranja hasta el marrón y el verde, lo que les permite camuflarse entre la vegetación marina.

Sin embargo, si destaca por algo es por su curiosa forma de reproducción, ya que en muchas especies son los machos los que quedan embarazados.

La hembra deposita sus huevos en una bolsa incubadora especial en el abdomen del macho, donde se fertilizan y desarrollan hasta que eclosionan como pequeños caballitos de mar jóvenes. El macho cuida y protege los huevos durante el período de gestación, siendo una curiosa excepción a la hegemonía de los cuidados maternales.

Ceratias holboelli

Esta especie de pez, muy similar al rape, posee un cuerpo largo y delgado, con una piel negra y translúcida.

Su característica más distintiva es un apéndice largo y delgado que se extiende desde la cabeza y se asemeja a un cuerno o una antena y que cuenta con bioluminiscencia, algo común a otros peces abisales.

Destaca porque sus miembros son extremadamente distintos si hablamos de machos o hembras. Este fenómeno se llama dimorfismo sexual, y aunque no es ni por asomo el único caso en la naturaleza, sí que es uno de los más llamativos debido a la diferencia de tamaño, donde la hembra es de un gran tamaño, a diferencia del macho.

Además, existe una gran dependencia entre ellos a la hora de reproducirse, ya que el pequeño macho acaba fusionando físicamente con la hembra, mezclándose los vasos sanguíneos de ambos e incluso perdiendo ciertos órganos.

De esta manera, el macho se convierte en algo así como un órgano reproductivo extra que permite a la hembra reproducirse, careciendo de una vida autónoma libre. ¿No te parece de lo más extraño?

El fondo marino esconde grandes secretos sobre su diversidad y el funcionamiento de su ecosistema. Se dice que conocemos más del espacio exterior que de la vida submarina. ¿Serás tú una de las personas que ayude a conocer un poco más el planeta?