Hola Guillaume, ¿podría presentarse en primer lugar a los lectores de Pêche.com?
Soy guía de pesca en Dieppe, Normandía. Tengo 42 años y soy un apasionado de la pesca desde los 13 años. Poseo 28 récords franceses y mundiales de captura de grandes peces en el mar. Antes de ser guía, me dediqué a la pesca y desempeñé las siguientes funciones: jefe de proyecto informático en Illex (Sensas), jefe de producto y jefe de equipo en Sakura (Sert) y, por último, jefe de marketing de Daiwa durante 9 años.
En el origen de esta carrera, cuando era adolescente, tenía un fuerte deseo de compartir mis experiencias de pesca en el mar creando mi sitio web en 1999 para explicar las técnicas de pesca de la lubina en particular. Conocí a algunos aficionados que ya estaban conectados, y con uno de ellos creé un nuevo sitio y una asociación llamada PecheWeb.com, que ha sido un verdadero éxito. Organizamos fines de semana de pesca en Bretaña, ayudamos a lanzar el primer concurso Open Bar y participamos en algunas grandes ferias en Bélgica y Francia.
En el Salón Náutico de París de 2005, Sensas me pidió que rediseñara el sitio web Illex.fr con una base de datos a medida. Hiroshi Takahashi trabajaba para esta marca y le encantó la herramienta que desarrollé. Después, Sert me pidió que desarrollara productos para la marca Sakura y un año más tarde Daiwa se puso en contacto conmigo. Todo sucedió demasiado deprisa y rechacé la primera oferta de Daiwa, pero volvieron a ponerse en contacto conmigo 2 años después con una propuesta que marcó un punto de inflexión en mi carrera. Me convertí en Director de Marketing del fabricante japonés a la edad de 29 años Lo di todo y prosperé, ayudando a mejorar la gama para la pesca marítima, conectando Beneteau y Daiwa para el lanzamiento del Barracuda Tour, rediseñando la página web y desarrollando considerablemente los catálogos. La cifra se duplicó en 9 años, y decidí pasar a reencontrarme con mi pasión convirtiéndome en instructor-guía de pesca en la hermosa Côte d'Albâtre, desde Dieppe, donde tengo mi base.
¿Por qué se hizo guía de pesca?
Durante mis estudios, entre los 18 y los 23 años, trabajé 2 o 3 meses en verano como socorrista en el mar. Seis días a la semana, me encargaba de vigilar las playas. Era una vida que me gustaba, con entrenamiento deportivo, prevención a pie o en semirrígida en las olas, y cuidando de la gente en el día a día... Mi sentido del agua y de las mareas se desarrolló considerablemente. Al final de este periodo, me lancé a la vida de la asociación con mi página web, decidido a profesionalizarla. Mis días se dividían entre la pesca, la enseñanza (artículos, debates en mi foro) y el desarrollo informático. Fue entonces cuando me di cuenta de que quería transmitir mi pasión y salir al agua. Tras dejar Sakura, justo cuando firmaba mi contrato como director de marketing en Daiwa, me matriculé en la escuela marítima y obtuve mi registro provisional de marinero. Mi mujer pensaba que estaba loco, ¡y tenía razón! Al final, aproveché mi tiempo libre antes de incorporarme al trabajo para cuidar de los niños mientras mi mujer se formaba para ser profesora. Una opción familiar mucho más coherente.
Después de 7 apasionantes años en un puesto estratégico, llegó Covid y me permitió trabajar desde casa, en la costa de Dieppois, mientras conseguía resultados convincentes. A pesar de ello, el teletrabajo no formaba parte de la rutina de la empresa y poco a poco decidí preparar mi nuevo proyecto. Pasé 2 años pescando intensamente en Normandía para conocer mejor mi zona, afinar mi programa, encontrar zonas poco pescadas y estaciones de repliegue para optimizar los resultados de mi programa de orientación.
¿Qué tipo de productos de orientación ofrecen?
Por el momento, me concentro en un único programa de pesca de altura frente a Normandía, fuera de los caminos trillados. He intentado transmitir bien el programa en mi nuevo sitio web www.guillaumefourrier.fr . Saliendo del puerto de Dieppe, nos lanzamos a alta mar para la pesca multiespecífica. A lo largo de la temporada se pueden capturar más de 20 especies. A veces capturamos más de 10 especies en un solo día, sobre todo cuando buscamos el rodaballo en las crestas, donde pueden picar muchos otros peces. Organizo la pesca con guía con el mismo rigor que cuando busco peces récord, con el objetivo de encontrar los mejores peces: lubinas, abadejos, doradas, rodaballos, rayas, etc. La pesca se prepara con el programa informático TimeZero, que analiza las lecturas por satélite del viento, los niveles de plancton, las mareas y las corrientes oceánicas para planificar el día al minuto. Cruzo todo esto con mi cuaderno de pesca para elegir las mejores opciones. Si en mi cabeza todo está planificado con rigor, el cliente viene con las manos en los bolsillos y disfruta de la jornada en un ambiente cordial. Se benefician de los resultados, sin las limitaciones.
Navegamos en un Barracuda 7 full-option cabin cruiser propulsado por un flamante motor Suzuki 200hp del año 2024. He reorganizado todo a bordo desmontando los asientos originales y haciendo muebles a medida para poder sentar a 5 personas en la cabina cuando navegamos en alta mar. A bordo, hay todo lo necesario para su comodidad: café, nevera, aseo, agua dulce... Le recibirán en el puerto de Dieppe con los pies secos. Hay aparcamiento gratuito. Se necesitan de 3 a 4 personas para ofrecer este servicio de calidad.
¿Qué significa para usted ser guía de pesca?
Creo que hay que ponerse al servicio del cliente, del alumno, para que su experiencia en el mar sea lo más satisfactoria posible. Hay que entender lo que quiere el cliente: pasarlo bien sin ataduras, aprender una técnica, progresar, mejorar. En función de ello, el objetivo a alcanzar no es el mismo. Esa es la esencia del trabajo, y luego hay que ser profesional, como en cualquier trabajo: llegar pronto para recibir a los clientes a la hora acordada con todo el equipo listo para salir, asegurarse de que la pesca se realiza con total seguridad y ser didáctico, sea cual sea el objetivo del cliente.
¿Pescas o no cuando haces de guía?
No, no pesco. Demuestro el gesto en la primera deriva con cada nueva técnica y luego observo atentamente cómo utilizan el equipo mis alumnos para poder guiarles si es necesario para conseguir buenos resultados. Si uno de los alumnos tiene menos aciertos, no dudo en intercambiar las cañas para reforzar su confianza. Con la caña que ha pescado, le quito cualquier duda material y podrá concentrarse mejor en su manejo. Mientras tanto, yo vigilo la electrónica, preparo el cebo cuando lo usamos, manejo la red de desembarque y desengancho los peces. Créeme, ¡te mantiene ocupado!
Los clientes no pagan un servicio de alta gama para verme pescar y hacerles una demostración. Por otra parte, si realmente no hay picada y los peces son visibles en la sonda, no me abstengo de lanzar discretamente un sedal para despejar cualquier duda antes de pasar a otro lugar.
¿Qué hace cuando no guía?
Sigo dando clases, escribo artículos sobre la pesca en el mar y en agua dulce y escribo un libro cada año. Preparo regularmente el barco para que todo esté siempre operativo y limpio. También paso mucho tiempo estudiando mi zona de pesca con el programa informático TimeZero; es un poco como mi libro de cabecera.
¿Cómo ve el guiado en Francia?
En Francia, los monitores-guías están plenamente cualificados. La BPJEPS y la unidad complementaria UCC de "pesca recreativa en el medio marítimo" son los diplomas de Estado necesarios para supervisar a las personas en el mar. Sin embargo, la profesión sigue estando poco extendida. Es necesario estructurarla mejor para hacer frente a las prácticas paralelas poco costosas, no cualificadas y no aseguradas. Al mismo tiempo, algunos guías cualificados ejercen como guías paralelamente a su actividad principal, a veces cobrando precios muy bajos. Bajar los precios no es bueno para la profesión, ya que un guía a tiempo completo no puede hacer frente a los costes y a los aplazamientos regulares debidos al mal tiempo. Pero hay algunos guías que hacen un trabajo de calidad, a buen precio y a largo plazo. Fueron estos pocos pescadores los que me inspiraron para montar mi propio negocio de instructor de guías de pesca en Dieppe. El tiempo dirá si tenía razón.
También he observado que cada vez se forman más guías y que los representantes de nuestra profesión están más estructurados (sindicato y federación de guías), y tengo la sensación de que la profesión de instructor-guía de pesca sólo puede fortalecerse en el futuro.
¿Qué consejo daría a la gente que quiere embarcarse en esta aventura?
Hablando sólo de guías de pesca marítima, es un trabajo difícil y precario. Mi consejo es que empieces otro negocio para poder ahorrar lo suficiente para comprar un barco. Es muy difícil que los bancos concedan créditos para un barco cuando se está creando una empresa de guías de pesca. Una vez adquirido el barco, tienes que explorar tu zona de pesca, intentar llevar a algunos amigos y hacer que pesquen, sin tocar la caña, para ver si realmente disfrutas ayudando a tus amigos a tener éxito y viviendo a través de la experiencia.
Si el objetivo es ir a pescar durante las horas de trabajo, yo desaconsejaría seguir ese camino: está condenado al fracaso. Si disfrutas ayudando a alguien a tener éxito ayudándole a pescar, esa ya es una señal mejor.
Este es el consejo de un padre de familia. Pero, sobre todo, se necesita pasión, mucha pasión por la pesca y el mar. Es el motor que te impulsa a superar los numerosos obstáculos de la actividad empresarial y el papeleo que te espera.
También debe estar preparado en términos de seguridad, ya que será responsable de los clientes a bordo, y debe ser plenamente consciente de los peligros (bancos de arena, condiciones meteorológicas, etc.).
El resultado son unos días agotadores pero satisfactorios, eso seguro. Pero prefiero una dura jornada de orientación a un día de cavilaciones frente a una pantalla.
Como pescador, ¿cuál es su sueño?
He pescado mucho en Francia y en lugares tan lejanos como Nueva Caledonia. Pero siempre me gusta aprender nuevas técnicas. En 2024, volveré dos veces a España para pescar atunes con los mejores especialistas, y cruzaré el Canal de la Mancha en mi barco para pescar tiburones y emissoles en Inglaterra, por citar sólo algunos. En Francia, diría que mi próximo reto será pescar un rodaballo grande y batir un nuevo récord francés, ¡sería fantástico! Y también sueño con pescar una juliana en Dieppe. Sé que hay algunas en Normandía. Tengo 200 especies a mis espaldas, pero nunca he tocado este pez.
