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Shell avanza en las energías renovables

Jason Klein, vicepresidente de Transición Energética, afirmó que, además de las fuentes no convencionales, siguen con la producción de hidrocarburos. 

Jason Klein, vicepresidente de Transición Energética Latinoamérica de Shell.

Jason Klein, vicepresidente de Transición Energética Latinoamérica de Shell.

Negocios Por: Portafolio

Luego de más de 100 años de dedicarse a la producción de hidrocarburos por todo el mundo, la multinacional holandesa Shell decidió dar un giro de 180 grados en su política para concentrarse en el desarrollo de una política de transición energética.

En diálogo con Portafolio, Jason Klein, vicepresidente de Transición Energética Latinoamérica de la citada organización afirmó que este nuevo enfoque, sin dejar de lado su habitual producción de hidrocarburos, se debe a la apuesta de la compañía en su apoyo a los Acuerdos de París de COP 21.

(Shell propone inhalar carbono del aire para salvar al planeta). 


Así mismo, dejó en claro que si bien Shell está en pleno desarrollo de su política de transición energética en proyectos solares y eólicos, también continuarán con su programa de producción de hidrocarburos. “Vamos a continuar brindando productos combustibles de origen fósil porque vemos la necesidad de su consumo en muchos lugares del mundo”, aseguró Klein, y recalcó que el gas natural es un combustible limpio.

¿Por qué una empresa dedicada por más de 100 años a la producción de hidrocarburos, da un giro hacia la transición energética?

En primer lugar Shell apoya los objetivos contenidos en los Acuerdos de París COP21, por lo tanto la meta es brindar la ayuda a todos los actores para hacer la transición para mantener el clima en condiciones sostenibles. Así, nuestro papel, no solo es ayudar solamente a los consumidores, sino también a la industria a hacer esa transición para que también sea sostenible. Además, tener en cuenta que se debe hacer la mezcla para mantener todas las energías en la canasta.

Luego de haber tomado la decisión de hacer la transición energética, ¿cómo fue el comienzo en el desarrollo de proyectos de energía sostenible?

Fueron muchos meses de preparación. Nuestro misión es la de disminuir la huella de carbono.

Estamos comprometidos en reducir en un 20% las emisiones de CO2 para el año 2035. Y en un 50% para el 2050. Para lograr esta meta, haremos una transición en las fuentes que tenemos en la canasta energética para nuestros clientes. Y la inversión para lograr estos porcentajes es entre US$1.000 millones y US$2.000 millones en la producción de nuevas energías limpias para los años 2021 y 2025.

¿Con la transición energética, disminuirá la producción de hidrocarburos para darle espacio a las energías renovables?

Vamos a continuar brindando productos combustibles de origen fósil. Esto lo seguiremos haciendo porque vemos la necesidad de tres sectores por su consumo como son el de acero, cemento y aviación. Al mismo tiempo haremos crecer la industria en el montaje y operación de fuentes de energías renovables.

¿En la actualidad, dónde desarrollan complejos de generación renovable no convencional en el mundo?

Tenemos un portafolio significativo de iniciativas desarrolladas o en desarrollo de fuentes renovables en varios lugares. Sin embargo, el foco está en aquellos sitios donde las políticas del mercado de energías es un poco más permisivo hacia estas tecnologías. En lugares como Europa occidental y Australia concentramos la operación. Desarrollamos proyectos de energía eólica offshore y onshore, e iniciativas fotovoltáicas. También tenemos complejos con base en hidrógeno y biocombustibles. De hecho, tenemos un proyecto muy interesante en Brasil, el cual es un joint venture en biomasa.

¿La transición energética contribuyó a mejorar la reputación de Shell entre sus grupos de interés?

Reconocemos que los combustibles fósiles afectan el cambio climático, y repito, por esto apoyamos los Acuerdos de París. Por esta razón con la oferta que tenemos en energías renovables no solamente estamos adicionando energía a la que ya estamos produciendo, sino también estamos ofreciendo una energía más limpia a nuestros consumidores. Y esto se relaciona con nuestra meta en la reducción de los niveles de CO21. Así, permitimos que nuestros clientes tengan más opciones de combustibles.

¿Cómo las energías renovables pueden garantizar la energía en firme?

A corto o mediano plazo el gas natural es la opción más limpia que genera energía y a la vez complementa a las fuentes de corriente renovable. Esto se logra con una transición desde el uso primario del carbón. Y además para resolver el tema de la intermitencia desde estas fuentes limpias. Pero con el tiempo, la solución está en el desarrollo de las tecnologías para el almacenamiento de energía. También se deben contemplar otras fuentes de energía convencional.

¿Cuál es el futuro para Shell en materia de energías renovables?

Estamos estudiando los próximos países donde desarrollaremos proyectos de energía renovable. Pero tenemos como foco toda la industria de generación de energía.

No solo hemos adquirido empresas dedicadas al montaje de plantas solares o eólica, sino también compañías que ofrecen tecnología, para proyectos eólicos offshore, para el almacenamiento de energía, para vehículos eléctricos, y para la red eléctrica. Estas adquisiciones son para meternos a fondo en el tema de transición hacia las energías renovables.

¿Colombia está en los planes de Shell para el desarrollo de energías renovables?

No puedo comentar al respecto.

¿Para Shell sería interesante desarrollar proyectos de energía renovable en Colombia?

Se deben tener en cuentas una serie de variables. El costo del proyecto en el mercado, así como las características del clima, como el nivel de irradiación solar o la fuerza de los vientos. Y si es offshore (frente a la costa de La Guajira) contemplar la profundidad. También los costos de la infraestructura.

Alfonso López Suárez
Redacción Portafolio