Información tomada del Diccionario Geográfico de Colombia
El municipio fue iniciado hacia 1896 en terrenos de la concesión Perdomo, como sitio de paso para caucheros en su proceso de comercialización del caucho. Su fundación se atribuye a José María Camargo. A comienzos del siglo XX se establecieron explotaciones ganaderas por su posición sobre el camino entre la selva y el interior del país.
Al crearse el departamento del Caquetá, el corregimiento fue elevado a municipio por medio del Decreto 963 del 14 de marzo de 1950 y se agregó a su territorio el corregimiento Guacamayas y las inspecciones de Santa Ana y Yarí.
La cabecera municipal está localizada a los 02°06'44" de latitud norte y 74°46'12" de longitud oeste, a una altura sobre el nivel del mar de 250 m. Dista de Florencia la capital departamental 151 km por vía terrestre.
El área municipal es de 17.873 km² y limita al Norte con Algeciras, Rivera, Neiva, Tello, Baraya (Huila), Uribe y La Macarena (Meta), al Este con Solano (Caquetá) y Calamar (Guaviare), al Sur con Solano y Cartagena del Chairá (Caquetá) y al Oeste con Cartagena del Chairá y Puerto Rico (Caquetá). Cuenta con las inspecciones de policía de Balsillas (San Luis del Oso), Campo Hermoso, Ciudad Yarí, El Recreo, Gibraltar, Guacamayas, Los Pozos, Puerto Betania, Santa Rosa y Tres Esquinas, además de 4 caseríos y 11 centros poblados. Para el primero de enero de 2016 registra 10.659 predios urbanos y 12.189 rurales.
Es cabecera de círculo notarial con una notaría, es oficina seccional de registro con competencia en San Vicente del Caguán y Puerto Rico y está adscrito al circuito judicial de Puerto Rico. Hace parte de la circunscripción electoral del Caquetá y según la Registraduría Nacional del Estado Civil, en el año 2011 el número de mesas habilitadas es de 87, con un potencial electoral de 27.336 votantes que equivalen al 11,17% del total departamental.
En el territorio se identifican tres unidades morfológicas: al norte, quebrada a escarpada que corresponde a la cordillera Oriental, en donde se destacan los cerros El Diablo y El Triunfo y la cuchilla de los Picachos; en el centro el piedemonte, formado por abanicos y conos aluviales y al este de ondulada a plana y corresponde a la llanura Amazónica.
Recorren el territorio numerosas corrientes, entre ellas los ríos Caguán, Pato, Balsillas, Yarí, Camuya, Ventura, Yaya, Ayaya, Ajajú, Avance, Coreguaje , al igual que numerosas quebradas y caños, entre ellas Las Ceibas, Las Lajas, La Granada, Malabrigo, La Luz, Cuyma, Yarumal, San Lorenzo, El Tuerto, La Gaitana, Guayabo y Los Lobos. Sus tierras se encuentran en el clima cálido, la humedad relativa promedio anual es de 82% y la temperatura promedio anual es de 25,2°C, siendo febrero el mes de mayor temperatura y julio el de menor.
La precipitación media anual es de 2.518 mm, está asociada a la Zona de Convergencia Intertropical (ZCIT) y se distribuye en un régimen monomodal que se extiende entre los meses de marzo a noviembre, siendo abril y junio los meses más lluviosos. En su jurisdicción se encuentra el Parque Nacional Natural Cordillera de los Picachos.
Según datos conciliados del Censo 2005, la población total estimada para el año 2016 es de 69.214 habitantes, de los cuales 43.150 se encuentran en la cabecera y 26.064 en el área rural. Del total de personas 151 son indígenas, 115 afrocolombianos y 3 raizales del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina. En su territorio se ubica el resguardo indígena Altamira.
La densidad de población municipal para el año 2016 es de 3,9 habitantes por km². La estructura demográfica indica que la población entre 0 y 14 años es el 44,11%, entre 15 y 64 años el 51,44% y la población de 65 años o más el 4,45%. Cuenta con 8.977 hogares registrados, donde el promedio de personas es de 6,31. De las 8.280 viviendas municipales, en el área urbana 4.762 son casas, 270 apartamentos, 303 cuartos y 4 son otro tipo de vivienda; en cuanto al área rural 2.913 son casas, 21 casas indígenas, un apartamento, 5 cuartos y un caso de otro tipo de vivienda. La tasa intercensal de crecimiento para el periodo 1993 - 2005 es de 0,034% por año, la tasa de natalidad para el 2014 es de 6,229‰ y la de mortalidad de 1,767‰.
De las 172 defunciones registradas para el mismo año, 12 fueron por causa de enfermedades transmisibles, 16 por tumores, 45 por enfermedades del sistema circulatorio, 2 por período perinatal, 55 por casos asociados con causas externas y 42 por otras causas. Por grupos de edad, entre 0 y 14 años fallecieron 18 personas, entre 15 y 64 años, 77 personas y de 65 años o más, 76 personas. En relación con el lugar de nacimiento, 24.844 personas nacieron en este municipio, mientras que 14.701 nacieron en otro lugar y 9 fueron registrados como oriundos de otro país.
La Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas reporta para el año 2012 como población desplazada, 33.629 personas que salieron y 5.710 que llegaron provenientes de otros lugares.
Para el 2007, de las personas en edad de trabajar el 37,12% corresponde a población económicamente activa. En cuanto a la participación por sectores económicos para el 2013, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural en la actividad agrícola reporta 5.719 hectáreas en cultivos permanentes, dentro de los que se destacan plátano (3.000 ha) y café (917 ha); 8.558 hectáreas en cultivos transitorios, entre ellos maíz (8.000 ha) y arroz (410 ha) y 1.705 hectáreas en cultivos anuales, donde predomina la yuca (1.705 has).
En relación con el sector pecuario para el año 2015, el ICA reporta 610.910 cabezas de ganado bovino; 31.032 porcinos, de los cuales el 100% corresponde a producción en traspatio. En otras especies pecuarias hay principalmente ganado equino con 20.686 cabezas, caprino con 1.122 ejemplares, ovino con 12.141 cabezas y bufalino con 1.540 ejemplares.
En el sector avícola se reportan 5.000 aves de postura. Por otra parte en el sector acuícola, la principal especie que se cultiva es cachama, reportando una producción total de 2.625 kg. En el sector industrial, de los 110 establecimientos reportados en el año 2007, se destacan 46 en los que se elaboran productos alimenticios, 12 donde se fabrican prendas de vestir, 11 donde se fabrican muebles, 9 donde se curten y adoban cueros y 8 en los que se elaboran productos de madera.
En cuanto a accesibilidad, se une por carretera con Puerto Rico y El Doncello. Cuenta con un aeropuerto que permiten el servicio regular y la comunicación con algunas poblaciones vecinas. Por vía aérea al municipio en el año 2014 llegaron, 4.920 pasajeros de diferentes lugares del país y 85,3 toneladas de carga de origen nacional. En el mismo periodo salieron 4.709 pasajeros a diferentes destinos en el país y 96,7 toneladas de carga. Los principales vuelos tomados por los pasajeros fueron Bogotá D.C., Solano, La Chorrera, Neiva y Villavicencio, mientras que los de carga fueron La Chorrera, La Macarena, Bogotá D.C., Solano y Leticia.
Para el año 2014, la población tiene acceso a los servicios públicos domiciliarios de acueducto con 5.292 abonados y una cobertura total de 63,91%, alcantarillado con 3.796 abonados y una cobertura total de 45,85%, energía eléctrica con 5.130 abonados y una cobertura total de 61,96% y telefonía pública con 1.490 abonados y una cobertura total de 18%.
La población municipal se beneficia con 6 canales de televisión abierta, de ellos 5 son nacionales, uno regional y además opera un canal de televisión cerrada por cable. Para la difusión cultural y recreativa cuenta con 3 emisoras, de ellas 2 de interés público en FM y una de interés comunitario. San Vicente del Caguán accede al servicio de internet mediante conexión de tipo satelital, conmutada y xDSL, con un total de 887 abonados.
En relación con la educación, del total de la población 3.119 personas mayores de 13 años son analfabetas; para el año 2014 en el nivel preescolar se matricularon 548 alumnos en el área urbana y 829 en la rural; en básica primaria 3.580 alumnos en el área urbana y 6.112 en la rural; en secundaria 2.334 alumnos en el área urbana y 2.604 en la rural y en educación media 739 alumnos en el área urbana y 289 en la rural.
Hoy celebramos estos nuevos tiempos de paz y reconciliación, buenos aires que llenan de esperanza a todos los Colombianos.
El IGAC tendrá el gusto de mapear la nueva cara de Colombia, una nación que se cansó de la guerra y que busca la construcción de paz desde la mirada detallada de cada municipio, su historia, su cultura, su demografía, entre otros factores que alguna vez fueron testigos del horror de la violencia. El Gobierno nacional ahora en adelante escribirá la ruta de la paz.