Silvia Pérez Cruz, la voz que cura las almas

SILVIA PÉREZ CRUZ, LA VOZ QUE CURA LAS ALMAS

Silvia Pérez Cruz acaba de sacar nuevo disco ‘Farsa (género imposible)’, y sus fans, que somos muchos en este país, estamos de enhorabuena. Es una cantante que roza la perfección en todo lo que hace. Su voz es verdadera. Conecta contigo. Te atrapa. La escuchas y te llega al alma. Por cómo lo hace, y qué es lo que dice. Es intensa, cálida, profunda. Una de las cantantes más mágicas que hay en España y volver a ella, es un placer. Es un bálsamo, en esta época de tiempos rotos.

Ella misma es consciente, que su voz no sólo la cura a ella, si no que nos cura y nos relaja a los demás. Empezó a cantar habaneras de niña con su padre y ha reinventado la música popular con una interpretación genuina. Nació rodeada de arte. Su padre tocaba la guitarra y su madre tenía una escuela de expresión artística. Desde muy pequeña se inició en el mundo musical. Ya, esas primeras veces, en las que se situaba enfrente del público, veía la emoción que provocaba.

Su creatividad la hemos vivido plenamente en Cartagena, actuando en el Cartagena Jazz Festival o en La Mar de Músicas. Sola o acompañada por Javier Colina o Toquinho, en el verano de 2019, cuando un abarrotado Auditorio Parque Torres vivió una noche plena, donde la brisa, los reflejos en el mar, y las luces en el teatro romano, se encontraban con la belleza hecha música, en un pequeño escenario, que tantas alegrías nos ha dado.

En su nuevo disco, dedicado a su madre, la música popular vuelve a ser protagonista. En él se aproxima a la ranchera, al fado, al tango… es un disco que recorre musicalmente geografías amadas por la catalana. De las trece canciones del disco, todas composiciones originales con letras propias y algún poema prestado, y al tener que elegir una para tu programa, me quedo con ‘Todas las madres del mundo’ que es de una inmensa belleza, profunda, en el que el Mar Mediterráneo nos mece, como lo haría una madre.

‘Todas las madres del mundo’ es un bellísimo poema de Miguel Hernández, que cuenta con unos arreglos de cuerda sublimes, y en el que Silvia ha contado con el archilaúd Javier Mas, último escudero de Leonard Cohen.

“Todas las madres del mundo

Esconden su vientre, tiemblan

Todas las madres del mundo

Esconden su vientre, tiemblan

Y quisieran retirarse

A virginidades ciegas

Y al origen solitario

Y al pasado sin herencia

Pálida y sobrecogida

La virginidad se queda

El mar tiene sed

Y tiene sed de ser agua la tierra…”

Eugenio González