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Sociedad

Historia de la peregrinación hacia Las Padercitas

Según el historiador Pedro Bazán, Las Padercitas son restos de un Fuerte que mandó a construir Don Pedro Jerónimo Luis de Cabrera en 1630 para defenderse de lo ataques de los indígenas. Aunque ninguna de las dos teorías han sido probadas. Las ruinas de barro se conservan dentro de una construcción de muros de piedra, existiendo al lado un templo con la misma técnica de construcción.

En 1942, estas ruinas fueron declaradas Monumento Histórico Nacional, y cada tercer domingo de agosto se reúnen allí los peregrinos de La Rioja, que caminan hasta allí para venerar al Santo apaciguador.

El templo que protege las ruinas fue construido en 1927 por órdenes del padre Bernardino Gómez, quien tuvo la idea de reservar estos importantes vestigios históricos de la intemperie.

La primera peregrinación a Las Padercitas fue encabezada en 1919 por el Padre Fray José Tomás Urquiza, superior del Convento de San Francisco.

Así es que surge esta tradición, que conmemora el milagro de la conversión indígena. Hasta hoy, se puede observar a los peregrinos realizando la Tradicional Peregrinación de San Francisco Solano a las Padercitas.

Los restos constan de paredes de adobe de unos tres metros de alto, y a unos tres metros de distancia unas pequeñas aberturas destinadas, acaso, a dar camino a las armas de fuego que los conquistadores utilizaban, o también posiblemente para vigilar el movimiento de los indígenas. El templete fue construido con piedra de granito, con paredes arcadas y capiteles tallados. Es un bello templo situado en un entorno natural encantador, accesible desde La Rioja capital por la Ruta Nacional Nº 75, en sentido oeste.

El Encuentro de los dos mundosCuando Don Juan Ramírez de Velazco trazó la cuadrícula de la ciudad, reservó algunos espacios para las órdenes religiosas: franciscanos, mercedarios, los dominicos, jesuitas y destinó un solar frente a la plaza mayor para la Iglesia Matriz dedicada a San Pedro Mártir. Todos ellos son un testimonio de aquel acto, pues continúan ocupando el lugar original; salvo el de los jesuitas que, al ser expulsada la Compañía de Jesús en 1767 fue convertido en la Casa de La Moneda y actualmente es el Colegio Joaquín Víctor González.Estos edificios encierran gran parte de la historia de la ciudad. Entre la Iglesia Catedral, dedicada a San Nicolás de Bari, patrono de la diócesis y el convento de San Francisco, se realiza la más importante ceremonia religiosa, por su antigüedad y significado, y concita la participación de miles de fieles de otras provincias argentinas: El Tinkunaco.Con esta voz quechua, que significa encuentro, fusión o mezcla, los riojanos reviven los acontecimientos sucedidos en la Pascua de 1593: Los diaguitas no soportaban más el mal trato de los españoles y resolvieron atacar la ciudad. Las armas apostadas en el fuerte de Las Padercitas fueron insuficientes para resistir el ataque de alrededor de 9000 indios conducidos por 45 caciques de otros tantos poblados.Ante esta situación los españoles recurrieron a los oficios de San Francisco Solano, quién logró restablecer la paz. Los padres Jesuitas tuvieron la feliz idea de recoger los sentimientos populares originados en este acontecimiento, codificándolos en una ceremonia religiosa que aún hoy se realiza cada 31 de diciembre, a las 12 horas, día en que los españoles renovaban sus autoridades.

Cátedra Abierta "Economía de Francisco"El Instituto de Formación Política y Social - Acción Católica Argentina iniciará el 18 de agosto la 2da edición de la Cátedra Abierta "Economía de Francisco", una propuesta virtual que tiene como objetivo reflexionar en torno a la convocatoria del Papa Francisco para pensar una economía más humana que incluya a todos. Participación no arancelada.Informes e inscripción por mail: ifp@accioncatolica.org.ar. Así lo informaron de manera oficial desde la fanpage de la Diócesis de La Rioja, sobre esta Cátedra Abierta. 

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