La Policía Nacional ha recuperado en una finca de Pedro Abad (Córdoba) dos estatuas de bronce del Alto Imperio Romano (siglo I después de Cristo) valoradas en unos seis millones de euros y que habían sido expoliadas del yacimiento arqueológico de Alcurrucén, situado la localidad. En la operación, la Policía ha detenido a un hombre, propietario de la finca y ha imputado a un hermano suyo y a un mediador. Estos pretendían vender las piezas en el mercado negro por la mitad de su valor real.

Según la Policía, las investigaciones comenzaron el pasado mes de enero, tras el expolio en el yacimiento de Alcurrucén, zona ocupada en su día por villas y necrópolis romanas. Los agentes lograron identificar a los mediadores y a los cómplices que pretendían vender las piezas, así como a los receptores, y localizar el lugar donde se ocultaban las dos estatuas.

La policía imputa a los acusados  un delito contra el patrimonio histórico y tentativa de contrabando de bienes históricos.

Las piezas intervenidas son dos esculturas huecas de bronce que representan dos figuras masculinas totalmente desnudas, de 1.30 y 1.50 metros de altura, de unos 30 kilogramos de peso y en muy buen estado de conservación.

Cuando fueron halladas, ambas presentaban amputaciones en brazos y piernas, una de ellas carecía de cabeza y parte del abdomen, y la otra no tenía órganos genitales. Gran parte de las piezas mutiladas han sido recuperadas.

Según un primer informe de arqueólogos de la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía en Córdoba, las piezas proceden del Alto Imperio Romano. Si se confirma que son piezas independientes podría tratarse de la representación de un efebo y, en caso de formar parte de un conjunto, pertenecerían al grupo escultórico de Cástor y Pólux (los Dioscuros de la mitología griega) con un valor de tasación de unos 6 millones de euros.

La operación ha sido desarrollada por agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Jaén.