Alejandro Tovalín A. y Víctor M. Ortiz V.*
El sitio ar
queológico de la Primera Sección
arqueológico
de Benemérito de las Américas, Chiapas**
El conocimiento arqueológico de la región de Marqués de Comillas es muy limitado, pues solamente se han registrado alrededor de una docena de sitios arqueológicos hasta ahora, debido en buena forma por lo lejano de la región y la carencia de caminos durante muchos años,
situación que comienza a revertirse. Esta región se ubica en el extremo este del estado de
Chiapas, lugar donde recientemente fue reportado el sitio arqueológico de la Primera Sección
de Benemérito de las Américas. El presente artículo describe diversos aspectos que se observaron en este sitio, tales como la arquitectura, la epigrafía e iconografía plasmados en alguno
de sus monumentos de piedra, además de su comparación y posible influencia con los más
importantes asentamientos prehispánicos, localizados en la cuenca superior del río Usumacinta
y el río Lacantún, así como de la vecina región guatemalteca de Petexbatún.
El sitio arqueológico de la Primera Sección de Benemérito de las Américas,
sitio que no había sido reportado con anterioridad, fue visitado en septiembre de 2001 por los autores del presente artículo, arqueólogos del Proyecto
Lacanhá del INAH y días después por el arqueólogo Arnoldo González, en atención a una denuncia hecha por el ayuntamiento de Benemérito de las Américas. Al lugar nos acompañaron Luz Elva Miranda, secretaria del municipio, el
agente auxiliar rural municipal, Benito Bernardino Bolaños y quince personas
más de la comunidad.
La región del alto Usumacinta
Existen pocos reportes sobre la arqueología de esta región fronteriza, básicamente del lado de México, ya que del lado guatemalteco hay una gran cantidad de sitios registrados e investigados a lo largo del río de la Pasión y del área
entre este río y el Chixoy, conocida como la región de Petexbatún, tales como
Altar de Sacrificios, Tamarindito, Arroyo de Piedra, Ceibal, Aguateca, el Pacayal,
Dos Pilas y Cancuén, entre otros. El lado mexicano está conformado por el
área que se extiende entre la ribera izquierda del río Chixoy y el río Lacantún
hasta su desembocadura en el Usumacinta, área en la cual se han registrado
varios sitios arqueológicos, entre los que podemos mencionar el Planchón de
las Figuras (García Moll, 1995: 10), el Pabellón (Mathew, 1997: 335, fig. 1045), Yaxún (Bullard, 1995: 47-66), el Palma (García Moll, 1976; Velásquez, 1986)
y San Lorenzo (Maler, 1995: 42; Bullard, 1995: 49-54) (fig. 1).
** Centro INAH Chiapas: ftovalin@prodigy.net.mx.
** Sitio referido por Ramón Carrasco en un mapa sin fecha, en el Atlas Arqueológico Nacional del INAH,
primera etapa.
34
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
17°
17°
91°
90°
90° 30’
Clave para sitios arqueológicos
01
02
03
04
05
06
07
08
09
10
11
12
13
14
Yaxchilán
GU
AT
24
EM
AL
A
Ar
Rí
Us
um
a
ro
o
yo
El
C
ta
cin
ha
M
ÉX
IC
O
“Clemente’s Milpa”
El Trapiche
El Pabellón
Plancha Piedra
El Porvenir
Laguna Ixcoche
“Second Ixcoche Site”
El Curro
Buena Vista
Acté
Paso Real
La Amelia
El Caribe
Aguas Calientes
15
16
17
18
19
20
21
22
23
La Florida
Dos Pilas
Tamarindito
Aguateco
Itzan
Paso Subin
Santa Rosa
Anonal
Tres Islas
La Libertad
Poblaciones actuales
24 Frontera Corozal
25 Benemérito de
las Américas
rro
Sohio
20
Río Subin
El Planchón
San Lorenzo
19
Ar
Sitio Benemérito
de las Américas
ro
Ag
5
21
ui
lar
Ruina
Abeja
10
8
yo
16°
30’
14
9
6
já
can
La
Río
Yaxún
Pico de Oro
7
2
1
3
Pasió
n
o
11
El Ceibal
Laguna
Azul
13
12
4
25
Rí
15
h.
Riac
n
S. Martí
Sierra
Mojada
Seibal
Sayaxché
16°
30’
22
Altar de
Sacrificios
Laguneta
El Chorro
El Resbalón
16
Car
rete
ra F
ront
era
Laguna
Petexbatun
17
18
El Pacayal
Santa
Amelia
ALA
Salinas
GUA
TEM
San Román
MÉ
XIC
O
Río
ón
Río Pasi
Laguna
Las Pozas
antún
Río Lac
23
Río
0
5
10
15
20
25
Kilometers
MÉXICO (CHIAPAS)
Chix
oy
GUATEMALA
90° 30’
91°
16°
Rí
(PETÉN)
(ALTA VE
RAPAZ)
90°
Concuen
o
16°
t Fig. 1 Mapa de la región de Marqués de Comillas y Petexbatún. Ubicación del sitio Benemérito de las Américas
(tomado de Willey et al., 1975: 10. Modificado por Ortiz y Tovalín).
Ubicación y descripción del sitio
El lugar se ubica en el municipio de Benemérito de las Américas, Chiapas, aproximadamente
a 900 m al suroeste de la cabecera del ejido Primera Sección de Benemérito de las Américas.
El sitio se localiza en una meseta de poca altura y cubierta de selva alta y mediana, en cuyas
laderas y parte superior se localizan mayoritariamente las estructuras. Gran cantidad de tiestos se observan en la superficie de las milpas
localizadas en las laderas y parte baja de la meseta, la cual es visible y también de fácil acceso desde la carretera fronteriza, de la que dista
aproximadamente un kilómetro. La ubicación
obtenida mediante un GPS es: 15Q 748477 E;
1832279 N.
El sitio abarca aproximadamente 8 ha y ocupa principalmente la parte alta de una alargada
meseta de unos 150 m x 300 m de lado y de 25
m de altura (fig. 2). Puede observarse en el costado noroeste que existen varias terrazas en la
35
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
careada. El tercio norte de la cima
es la parte más alta y se eleva unos
0
9 m con respecto a la terraza ya
mencionada, mientras que los dos
5
tercios del lado sur son 4 m más
bajos y cuyos costados este, oeste
y sur están ocupados por un largo
P.S. 2
basamento escalonado en cada caso, de aproximadamente 20 m a
P.S. 1
25 m de ancho, sobre los cuales se
levantan varias estructuras piramiE. 5
P.S. 3
dales, de las cuales se reconocieron al menos tres en esta ocasión,
A. 4
A. 3
E.J.
que hemos referido como edificios
A. 2
E. 4
1 a 3 y que presentan hasta cuaE. 1
tro cuerpos de contención con alA. 1
turas que fluctúan entre 2.50 m a
E. 2
3.50 m. Al centro de estos largos
basamentos escalonados se sitúa
CLAVE
a 2 m más abajo una amplia plaza
PS - Pasillo subterráneo
hundida de aproximadamente 65
E - Estela
A - Altar
m por 120 m de lado. Diversas exEJ - Escalera jeroglífica
- Pozo de saqueo
cavaciones ilegales dejaron al descubierto los rellenos constructivos
y varios muros, todos ellos constituidos por sillares de caliza bien
labrados y generalmente de gran
tamaño (fig. 4).
El sector norte está represent Fig 2 Croquis del sitio de Benemérito de las Américas (dibujo de
tado por una extensa plataforma,
Alejandro Tovalín).
que contiene al menos la estrucparte baja de la elevación. Como primer paso,
tura de mayor altura del área visitada del sitio,
entramos al sitio por su costado noroeste, subicon 5 m de altura y planta casi cuadrangular de
mos a una amplia terraza de 60 m x 80 m, que
20 m por lado, al que denominamos Edificio 4.
contiene varios montículos pequeños y muy
Una larga cala excavada nos permitió conocer
bajos, uno de éstos mide 6 m x 10 m de lado x
que la estructura piramidal tiene dos etapas
1.50 m de altura, que hemos nombrado como
constructivas (fig. 5), la más antigua presenta
Edificio 5 y fue excavado ilegalmente dejando
dos cuerpos escalonados, siendo el superior el
al descubierto parte de la bóveda de un pasillo
más alto con poco más de 2 m. La cima conserva
subterráneo (P.S.1) (fig. 3) con bóveda maya,
parte de los muros mamposteados de un edifique posiblemente debió ser una cripta, ya que
cio, cuya planta y tamaño no pudo ser definido.
originalmente estaba totalmente sellada. AcUn piso de estuco cubre la parte exterior del
tualmente se encuentra anegada por agua pluedificio, así como del entrepiso de los dos muvial, por lo que no fue posible investigar su inros de contención.
terior.
La segunda etapa constructiva hizo crecer
Esta terraza limita al este con la cima de la
en longitud, aproximadamente 2.5 m, la parte
meseta cuya ladera presenta restos de varios
inferior de la pirámide, ya que fueron edificacuerpos escalonados hechos con piedra caliza
dos dos nuevos cuerpos de contención al frente
15
Edif. 4
10
Edif. 5
Edif. 1
Edif. 2
5
Edif. 3
15
E S C A L A
0
5
10 m
36
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
t Fig. 3 Vista del pasillo subterráneo 1.
cuerpo, como al exterior del edificio que corona la pirámide. El relleno expuesto está conformado
por una mezcla de piedra caliza de
forma y tamaño diverso y tierra.
Próximo a esta estructura, 15 m
al noroeste, en una parte expuesta del relleno de la terraza quedó
expuesto parte de un pasillo subterráneo con bóveda maya, bloqueado por el escombro existente en su interior (P.S. 3).
Entre el costado sur de la alta
plataforma norte y el nivel de la
gran plaza hundida, existe un amplio entrepiso intermedio en donde reposa la Estela 5. La comunicación entre la
plaza y el entrepiso se dio a través de una escalinata de 15 m de longitud, que más adelante
se describirá, mientras que para acceder del entrepiso hasta la parte superior de la plataforma
norte no hay vestigios de otra escalera, ya sea
por que no existe, o por que se encuentra en un
área muy alterada recientemente que dejó al
descubierto la entrada a un pasillo subterráneo
(P.S.2).
Monumentos labrados
t Fig. 4 Grandes sillares de caliza bien labrada fueron
utilizados en los rellenos constructivos.
del primer cuerpo de la primera etapa. Llama
la atención el empleo de una sola losa de caliza
vertical como recubrimiento exterior del segundo cuerpo de contención. En esta etapa se emplearon apisonados en lugar de pisos de estuco, tanto en el entrepiso del segundo y tercer
En diversas partes de la plaza se localizaron los
fragmentos de cinco estelas labradas y cuatro
altares circulares, dos de ellos labrados. La mayoría se encontraron en el límite de la plaza y
los basamentos de los edificios 1 a 3; es posible
que al menos las estelas 1 a 3 hayan estado asociadas directamente a los edificios 1 y 2, no así
la Estela 4 que posee su propia base en el sector noroeste de la plaza, en donde también los
altares cilíndricos estaban todavía in situ.
La Estela 1, totalmente erosionada e ilegible se encuentra partida en dos grandes fragmentos, con una longitud total de 2.16 m x 0.7
m de ancho y 0.35 m de grosor.
La Estela 2 está muy fragmentada (fig. 6),
siendo visible al menos cinco partes y seguramente el escombro que las rodea puede estar
cubriendo el resto de la estela. En el labrado de
37
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
0.24 m x 0.19 m y 0.02 m de profundidad (fig. 8), en promedio, de
Apisonados
los cuales se conserva cuatro y dos
Piso de
de ellos medianamente conserestuco
vados. Con base en las dimensioPrimera etapa
nes de estos cartuchos y el espaconstructiva
cio que los separa, se puede inferir
que este costado debió contener
de seis a siete jeroglíficos. El cosSegunda etapa
Gran cala de saqueo
constructiva
tado izquierdo, también estuvo
ocupado por el mismo tipo de cartuchos jeroglíficos, aunque de éstos se conserva solamente uno
muy deteriorado.
0
1
2
3
4
5m
Con base en las proporciones
de la cabeza del personaje, podríat Fig. 5 Corte de la cala de saqueo en el edificio 4 (dibujo de A. Tovalín). mos considerar que la Estela 2 mediría, al menos 3.44 m desde el
la parte frontal del monumento, aunque muy
nivel donde estaría parada hasta la punta supeincompleto, se plasmó un personaje de alta jerior del monumento, más aproximadamente
rarquía, de pie con el cuerpo de frente y el rostro mirando a su izquierda. Porta un tocado elaborado ricamente, que representa al rostro del
dios K’awiil o dios K (fig. 7), de cuya trompa sale una flor de lirio acuático y un elemento alargado o cigarro del cual sale humo; en la parte
alta del rostro porta un elemento circular que
puede corresponder a un objeto para cortar y
atrás de éste se observa un espacio rectangular
relacionado con un espejo de obsidiana. Una
serie de pequeñas plumas ocupan la parte posterior.
El “individuo” porta orejeras y un collar de
grandes cuentas esféricas de jadeíta. Asimismo,
ostenta un peto con diversos elementos decorativos que no son legibles por su grado de deterioro. Un fragmento de la estela permite ver
0
que en la mano izquierda hay una ancha pulsera formada por cuatro hiladas de entre cinco o
seis cuentas de jadeíta, de la cual penden dos
plumas cortas. También se aprecia en otro fragmento, que el personaje usa un faldellín terminado en punta, así como una sección del largo
paño que pende al frente del taparrabo y que
está decorado con el rostro del dios C.
1m
El costado o canto derecho de la estela se
encuentra labrado con varios cartuchos jeroglíficos rectangulares de esquinas redondeadas de
t Fig. 6 Fragmentos de la estela 2 (dibujo de A. Tovalín).
38
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
t Fig. 7 Fragmento superior de la estela 2.
otro metro que correspondería a
la espiga. Las partes encontradas
de la estela nos permiten inferir
su forma ligeramente lanceolada; la parte superior es la más ancha y mide 1.03 m, y disminuye
en la parte inferior. El grosor promedio de la estela es de 0.29 m.
De la Estela 3, sólo se encuentra a la vista la parte superior, que
mide 1.12 m de ancho x 1.25 m de
altura y 0.32 m de grueso (fig. 9).
En su cara frontal se logran apreciar diez columnas de pequeños
jeroglíficos, cuyo número de filas se incrementa
de izquierda a derecha. Comienza con dos columnas de ocho filas, para aumentar a dos columnas más de diez filas y hasta trece, al menos, en
las subsecuentes. La mayor parte de los jeroglíficos están muy erosionados. La parte superior
del costado izquierdo de la estela también fue
decorado con dos columnas de ocho jeroglíficos
del mismo tamaño que de los de la cara frontal.
Bajo estas dos columnas se encuentran otros elementos decorativos, constituidos por tres ovoides, los dos más grandes alineados verticalmente y el tercero colocado junto al costado derecho
del superior. Estos ovoides debieron formar parte del elemento decorativo que ocupaba el sector inferior izquierdo de la cara frontal.
0
t Fig. 8 Aspecto de los grandes cartuchos jeroglíficos
del canto de la estela 2.
1m
t Fig. 9 Fragmento de la estela 3 (dibujo de A. Tovalín).
39
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
La Estela 4, en realidad debe tratarse de un
tablero, ya que a pesar de ser la parte inferior
del monumento, éste carece de espiga. Este fragmento mide 1.49 m de largo x 0.69 m de ancho
y 0.35 m de grosor (fig. 10). Se conservan tres
filas de ocho jeroglíficos muy erosionados, en
donde el cartucho en C2 parece hacer referencia al título “k’atun ahaw” de algún personaje
cuyo nombre debe estar inscrito entre D2 y E2,
y en F2 el ordenamiento de los prefijos y sufijos
podrían dar referencia a un jeroglífico emblema, para continuar con la genealogía del personaje en cuestión en H2, que sin lugar a duda se
refiere al símbolo para “hijo de padre”.
A
B
C
D
E
F
G
A
B
1
2
3
4
5
6
H
1
7
2
3
0
1m
t Fig. 10 Fragmento de la estela 4 (dibujo de A. Tovalín).
0
1m
t Fig. 11 Fragmento de la estela 5 (dibujo de A. Tovalín).
Al centro del largo y amplio entrepiso entre
el costado norte de la plataforma norte y la gran
plaza, justo al frente del P.S.2, se localizó la parte inferior de la Estela 5, cuyas dimensiones
son 1.90 m de largo x 0.54 m de ancho y 0.36 m
de espesor (figs. 11 y 12). Contiene dos columnas de siete jeroglíficos muy erosionados. Pocos datos pueden leerse, entre éstos tenemos
la variante de cabeza del número 15 en B2 y el
jeroglífico de “hijo de padre” en A5, aunque no
es legible a qué personaje se refiere.
Sobre el Altar circular 1, no hay mucho que
decir, pues es liso y mide 0.73 cm de diámetro
x 0.32 cm de altura.
El Altar circular 2 está fragmentado y mide
aproximadamente 1.40 m de diámetro, tiene
restos de una banda circular en su cara superior
con al menos seis jeroglíficos de gran tamaño
(fig. 13), muy erosionados, en donde se puede
leer en la sección derecha de A2 el nombre de
un personaje que se llamaba “Jaguar” y algo más
que no es legible. A continuación en A3 se encuentra un cartucho con el sufijo compuesto
por dos elementos circulares que se lee como
“ahaw o gobernante” y que es típico de los jeroglíficos emblema, aunque en este caso no es
legible el signo principal, sino únicamente el
sufijo, que todo en conjunto recuerda al del vecino sitio de Altar de Sacrificios, distante 19 km
al sureste. En A4 aparece el signo de “hijo de
padre”, aunque los siguientes jeroglíficos son
ilegibles, por lo que no se puede identificar el
nombre del padre del personaje principal.
El Altar circular 3 es liso y de éste sólo se logró observar un fragmento de 0.70 m de largo,
40
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
t Fig. 12 La estela 5 in situ.
3
2
4
5
1
6
A
0
1m
t Fig. 13 Fragmento del Altar circular 2 (dibujo de A.
Tovalín).
pero que al extrapolarlo sugiere que su diámetro debió tener 1.50 m.
El Altar circular 4 es liso, está roto y mide
1.10 m de diámetro.
El último monumento labrado registrado, corresponde a una escalera jeroglífica, la cual está
ubicada al frente de la Estela 5 y permite el
acceso a la gran plaza mediante cinco o seis peldaños. La escalera mide aproximadamente 15
m de longitud, aunque es notorio que el peldaño inferior es más corto. Seis grandes bloques de caliza labrados con jeroglíficos, tanto
en la huella como en el peralte
fueron localizados, removidos al
pie de los escombros de la escalinata y otros dos a media altura
en su extremo derecho. Estos bloques de caliza, al parecer fueron
desprendidos de su lugar original
en la escalera y debieron formar
parte de al menos uno de los escalones. El peralte de estos escalones jeroglíficos es de 0.32 cm hasta 0.35 cm, con un ancho de 0.53
cm a 0.70 cm y 0.80 cm a 1.20 cm
de profundidad, por lo que la huella mínima debió ser de 0.80 cm.
Tanto los cartuchos jeroglíficos labrados en la huella como los
del peralte, se realizaron al interior de un espacio casi circular o cuadrangular
con las esquinas redondeadas, que se encuentra unido entre sí mediante dos alargados y angostos canales separados por uno o más delgados elementos decorativos al alto relieve. Los
cartuchos tienen un diámetro promedio de 45
cm. Los hemos denominado Piedra Labrada 1
a 5 de la Escalera Jeroglífica (P.E.J.) conforme
su ubicación de izquierda a derecha a lo largo
de la escalera.
De la P.E.J.1 (fig. 14a) sólo se conoce su cara
lateral izquierda, la cual presenta diversos elementos alargados y circulares, que pueden ser
la representación de la cabeza de alguna deidad
de grandes ojos y gruesa nariz ganchuda, que
porta una serie de detalles de serpiente arriba
del ojo y la mandíbula. Por la ubicación de la
cara labrada, esta piedra debió ser el extremo
izquierdo del escalón jeroglífico.
La P.E.J.2 (figs. 14b y 15) presenta en la huella la fecha 4 manik, aunque los restos de lo
que parecen ser otros dos elementos sobre la
mano podrían sugerir otra lectura. La parte del
peralte está muy destruido, pero logran verse
dos barras verticales y al menos dos puntos, que
con base en el espacio faltante abajo, podría
leerse como 13 o 14; desafortunadamente el resto del cartucho no es legible. Evidentemente,
no se trata de la fecha del mes, ya que 4 manik no coincide con ningún numeral 13 o 14 de
41
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
a
Cara lateral izquierda
b
Peralte
Peralte
Huella
Huella
c
0
1m
t Fig. 14 Escalera jeroglífica: a) piedra labrada 1; b) piedra labrada 2
y c) piedra labrada 3 (dibujo de A. Tovalín).
mes, sino debe tener otra connotación, por lo
pronto desconocida.
La P.E.J.3 (fig. 14c) muestra en la huella del
escalón una fecha (fig. 16), aunque muy erosionado el signo del día, el del mes parece ser “sac”,
y los numerales corresponden a 4 y 6 respectivamente. El mes 6 sac, coincide con el numeral 4
y con los días ak’bal, lamat, ben y etz’nab, pero
debido a la presencia de una protuberancia en
el lado superior derecho del jeroglífico, nos inclinamos a identificarlo como la representación
zoomorfa del día “lamat”, cuyas fechas leídas
en diferentes ruedas calendáricas corresponden
a los años 614, 666, 718, 770 y 822 d.C. El peralte de la P.E.J.2 (fig. 17) muestra del lado izquierdo un cartucho compuesto por dos signos,
el del lado izquierdo corresponde a 16 ahaw y
el del lado derecho a uno k’atun,
mientras que en el lado derecho
del peralte se encuentra otro cartucho que muestra la representación de un personaje sentado, con
gran tocado y sosteniendo un elemento acuático; es muy posible
que en los elementos de su tocado pueda deletrearse su nombre, de la misma forma en que
sucede con la Estela 22 de Naranjo, que refiere el nombre de K’ak’
Tiliw Chan Chaak (Martin y Grube, 2000: 77). Por lo anterior, proponemos que esta piedra refiere
el festejo del primer periodo de
20 años del gobernante ahí retratado, en una fecha 4 lamat 6 sac,
y tal vez se refiera a él mismo como el número16 en el linaje de
los “ahaw” del lugar.
La P.E.J.4 (fig. 18a) tiene en
la huella el jeroglífico de un felino, posiblemente un jaguar por la
mancha achurada sobre el ojo, se
logra observar su oreja, pero no así
el resto de los elementos inferiores. En el peralte sólo se logra percibir la parte superior del jeroglífico, que puede leerse como “ma”
y a su lado izquierdo un elemento
t Fig. 15 Vista de la huella de la piedra labrada 2 de la
escalera jeroglífica.
42
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
t Fig. 16 Huella de la piedra labrada 3 de la escalera
jeroglífica.
anular, que no representa el numeral uno, por
lo que, probablemente no se trate del mes “mac”.
Finalmente, en la huella de la P.E.J.5 (fig.
18b) se aprecia el rostro de otro felino, sumamente estilizado con ceja ondulante, que mira
de perfil hacia el fondo del escalón. En el peralte se lee 4 tun o quizá 4 k’atun ahaw.
Comentarios y conclusiones
En este apartado analizaremos los aspectos del
sitio que se refieren a la iconografía, epigrafía,
tipo de labrado que se observó en las estelas y
escalera jeroglífica, la cerámica, tipo de planta
arquitectónica del conjunto constructivo, materiales constructivos y su comparación con otros
sitios de la región, así como su inserción dentro
de las rutas de comercio e intercambio o de influencia de las importantes ciudades vecinas,
con base en lo cual, propondremos nuestra conclusión.
El análisis de los atributos que se observaron en el personaje de la Estela 2, arroja luz sobre el evento ahí representado, el cual está relacionado con el festejo de “fin de periodo” y al
t Fig. 17 Peralte de la piedra labrada 2 de la escalera
jeroglífica.
rito de autosacrificio, lo cual está basado en el
siguiente análisis. El tocado del personaje ostenta al dios K o G II, el cual es una manifestación de Itzamná como una deidad de la vegetación; asimismo está asociado con el día 1 ahaw
impuesto a los gobernantes y es el dios de los
linajes y ancestros reales, que generalmente aparece en contextos de “fin de periodo” y ritos
de autosacrificio en la ascensión al trono (Tate,
1992: 55).
Por otro lado, el dios C que decora el largo
lienzo frontal del faldellín, representa la sangre de los sacrificios reales, el cual en muchas
estelas de diversos sitios se encuentra asociado
también con la celebración de “fin de periodo”,
tal como se puede apreciar en la Estela 1 de
Dos Pilas (op. cit.: 56), donde el dios C plasmado en el lienzo del faldellín simboliza la sangre
del autosacrificio del gobernante retratado, que
43
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
b
Peralte
Huella
a
0
1m
t Fig. 18 Escalera jeroglífica: a) piedra labrada 4
y b) piedra labrada 5 (dibujo de A. Tovalín).
de igual manera puede interpretarse para nuestro caso.
En cuanto al tipo de faldellín usado por el
personaje de la Estela 2, es similar al que Tate
(op. cit.: 79) refiere como liso terminado en punta y es empleado por gobernantes de muchas
ciudades mayas del Clásico durante los ritos de
autosacrificio y a decir de la misma autora (ibidem) muestran una evolución en su diseño, que
va del tipo liso al que tiene muescas o es dentado. Este último aparece en Yaxchilán después
de 9.16.15.0.0 (766 d.C.). En caso de poder
extrapolar dicha evolución de estilos al sitio en
cuestión, podríamos ubicar cronológicamente
a la Estela 2 en una época previa a la segunda
mitad del siglo VIII.
Finalmente, la escasa información jeroglífica
conservada en el costado derecho, nos muestra
en la parte superior el jeroglífico que se traduce como “hijo de padre” y bajo éste el que debe
ser el nombre del padre, y que en este caso está
compuesto por dos elementos, el de la izquier-
da, aunque no muy claro, parece un escudo y el
de la derecha el rostro de un felino, quizá un
jaguar, por lo que podría leerse como “escudo jaguar”, por lo que, aunque el nombre del personaje retratado en la Estela 2 nos sea desconocido, sabemos que se trata del hijo de un ahaw de
nombre “Escudo Jaguar”. Estos dos personajes
pudieron ser gobernantes del lugar o gobernantes de un sitio importante en donde erigieron
monumentos para perpetuar su presencia y conquistas.
Ahora bien, si hacemos un reconocimiento
de los registros donde se menciona la existencia de algún gobernante con el nombre de “Escudo Jaguar” y cuyo hijo también haya subido
al poder después de él, se reduce a unas cuantas referencias. De esta manera, en Dos Pilas
gobernó Itzmnaaj B’alam, también mencionado como “Escudo Jaguar”, quien ostentó el poder brevemente en esa ciudad hacia 692 d.C.
y de quien no hay referencia de su descendencia, sólo conocemos que inmediatamente a su
caída gobernó su hermano Itzamnaaj K’awiil durante largos 28 años, imponiendo la hegemonía
de Dos Pilas en la región de Petexbatún y del
río de la Pasión (Martin y Grube, 2000: 58).
Es seguramente en Yaxchilán, donde tenemos las referencias más claras al respecto, pues
existieron tres gobernantes de nombre “Escudo Jaguar”. Escudo Jaguar I fue el segundo
rey de la ciudad y gobernó a mediados del siglo
IV d.C. De este personaje no se cuenta con referencia alguna sobre su descendencia (op. cit.:
119). Posteriormente se encontraron Escudo Jaguar II y III, cuyos hijos respectivos también
gobernaron: Pájaro Jaguar IV, entre 752-768; y
K’inich Tatb’u Cráneo III, hacia 808. Este último también conocido como Mak’ina Tah Cráneo III. ¿Podría entonces, el señor Escudo Jaguar y su hijo, mencionados en la Estela 2 de
Benemérito de las Américas, tratarse de alguno de aquellos que gobernaron Yaxchilán?
Para contestar lo anterior, abordaremos primero otros aspectos del sitio y sus materiales
arqueológicos.
Es claro que en Benemérito de las Américas,
existen dos tipos de labrado que se emplearon
para representar los jeroglíficos, uno correspon-
44
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
de a aquellos cartuchos jeroglíficos de gran tamaño, redondeados y profundos en su bajorrelieve, observados tanto en la Estela 2 como en
el Altar circular 2 y en la escalera jeroglífica. El
otro tipo está representado por cartuchos de
forma cuadrangular, pequeños y de menor profundidad en el tallado, como puede verse en
las estelas 3, 4 y 5. En este sentido, el primer tipo no se observa en ningún sitio importante de
la región del Petexbatún ni en Yaxchilán y Bonampak, a diferencia del segundo tipo, que es
bastante común en ambas regiones, por lo tanto podemos señalar, que el uso de los grandes
jeroglíficos es un distintivo propio del sitio.
En cuanto a la ubicación de los cartuchos jeroglíficos de gran tamaño en el costado de la
Estela 2 y en la huella y peralte de la escalera
jeroglífica, podemos mencionar lo siguiente. Al
respecto del primero, no se cuentan con reportes de alguna estela con cartuchos labrados en
los cantos en ninguno de los sitios importantes
de la vecina región de Petexbatún y del río de
la Pasión. Por otro lado, donde sí hay varios
ejemplos, es en la zona de Yaxchilán y Bonampak, cuyas regiones de influencia se extienden
al norte de Benemérito de las Américas. Como
ejemplo tenemos la Estela 7 de Bonampak, una
estela lisa que conserva una columna con 7 pequeños jeroglíficos muy erosionados en su costado este; mientras que en Yaxchilán, Pájaro Jaguar IV erigió las estelas 1, 10 y 11, con fechas
que abarcan del año 752 al 766 y cuyos jeroglíficos son numerosos, cuadrados y pequeños, distribuidos homogéneamente en todo lo ancho
del costado o canto. Al respecto, es evidente la
mayor cercanía de Benemérito de las Américas
con su vecina región septentrional en el uso de
jeroglíficos en los costados, aunque manteniendo ambas partes diferencias en el tamaño y
forma.
El uso de escaleras jeroglíficas (E.J.) en la
región vecina guatemalteca es común, pues se
han reportado para los sitios de Tamarindito
(Valdés et al., 1994: 441), Dos Pilas y Ceibal
(Martin y Grube, 2000: 63), aunque en estos
casos solamente es el peralte de los escalones
el que se encuentra labrado, a diferencia de las
escaleras jeroglíficas 3 y 4 de Yaxchilán, donde
el peralte y la huella de la E.J.3 están cubiertos
de cartuchos, mientras que en la 4 sólo se presentan en la huella (Tate, 1992: 252-258 y 240249), monumentos que pertenecen a las regencias de Escudo Jaguar II y Pájaro Jaguar IV,
respectivamente, es decir, entre los años 683 a
800 d.C. Por lo anterior, nuevamente es Yaxchilán el sitio con el que se guarda alguna ligera
semejanza.
Por otro lado, la cronología proporcionada por
la cerámica de superficie observada en la parte baja de la Acrópolis de Benemérito (fig. 19),
abarca del final del periodo Clásico temprano
hasta el Clásico terminal y principios del Posclásico temprano, por lo que el sitio muestra una
larga ocupación. Para el Clásico temprano contamos con parte de un cajete trípode, con pequeños soportes cónicos sólidos y paredes verticales ligeramente curvas divergentes, con
decoración incisa y baño blanco al exterior y engobe café oscuro al interior, que recuerda a las
formas y decoraciones de los tipos Balanza Negro y Lucha Inciso (Sabloff, 1975: 107-112, fig.
206h, 208 y 210).
Asimismo, los pocos ejemplares detectados
en Benemérito de las Américas del tipo Subín
Rojo, se asemejan más a la variedad Huicoy de
finales del Clásico temprano del cercano sitio
de Altar de Sacrificios (Adams, 1971: 22-23),
pues poseen base anular y carecen del característico reborde medial existente en el Clásico tardío en las variedades Bocul y Subín del
mismo sitio (ibidem) y en Ceibal (Sabloff, 1975:
160-164). En el mismo sentido, al comparar este
tipo de Subín Rojo con el descrito en sitios ubicados más al norte de Benemérito de las Américas, observamos gran similitud en la forma,
pues se trata de grandes cazuelas u ollas de boca
muy abierta, con el típico engrosamiento externo del borde y engobe rojo al interior y no
más abajo del borde al exterior, como la que se
aprecia en el tipo Subín Rojo variedad no especificada de Yaxchilán (López, 1989: 123-125),
Bonampak (Fournier et al., 1987: 74-77) y Lacanhá (Tovalín, 2004: 8, 26) correspondiente
al Clásico tardío. Podemos agregar, que en estos tres últimos sitios los ejemplares de Subín
Rojo, también carecen del reborde medial.
45
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
Naciones Gris (Sabloff, 1975: 210211).
En cuanto al material constructivo, llama la atención en Benemérito de las Américas el tipo de
caliza empleada en los diversos
basamentos, tanto en el recubrimiento como en los rellenos, ya
Complejo cerámico Tzakol
que son de color amarillento rojizo y de menor dureza que la caliza más blanca. Este tipo de sillar es parecido a los encontrados
28 cm
en el cercano Yaxún (Velásquez,
1986: 7-20), pero también en lugares tan lejanos como Palenque,
donde se les ha reportado en los
Miseria Aplicado
costados este y norte del Palacio,
Subín Rojo
en algunas etapas constructivas in21 cm
30 cm
40 cm
termedias que corresponden al si32 cm
glo VII, así como en el basamento
de los edificios II y V del Grupo
Norte (Tovalín y Ceja, 1996: 100).
Material con cierto grado de semejanza se observa en sitios de los
Altar Naranja
altos orientales de Chiapas, como
Chinkultic, Tenám Puente (Lalo
Tres naciones gris
0
5m
y Aguilar, 1996: 23) y Tenám Rosario (de Montmollin, 1995: 8889). Por otro lado, es diferente a
t Fig. 19 Cerámica del periodo Clásico medio (dibujo de A. Tovalín
los sitios más al norte como Boy V. Ortiz).
nampak, Lacanhá y Yaxchilán, en
Por lo anterior, es muy probable que el Subín
donde las piedras careadas, aunque de menor
Rojo de Benemérito de las Américas haya tenitamaño y mayor dureza, fueron empleadas bádo una marcada influencia temprana de Altar
sicamente en los exteriores de los edificios con
de Sacrificios, para posteriormente haberlo recibóveda maya. Es probable que, en cuanto al uso
bido de los grandes sitios norteños. Otros tipos
de grandes sillares, Benemérito de las Américerámicos detectados para el periodo Clásico
cas haya funcionado como un sitio frontera, entardío son Tinaja Roja, variedad no especificatre la región austral de la cuenca del Lacantún,
da (Sabloff, 1975: 158-160), Cambio sin engobe,
los altos orientales y posiblemente parte de los
variedad no especificada (op. cit.: 153-155) y
sitios del Petexbatún y los del Usumacinta meMiseria aplicado, variedad no especificada (op.
dio, donde podemos incluir a Yaxchilán, Bonamcit.: 174-177). Los tiestos del periodo Clásico
pak, Lacanhá, Ojos de Agua, Plan de Ayutla, e
terminal son los más abundantes y corresponincluso Piedras Negras, lo cual no debió impeden a las vajillas de cerámica Naranja y Gris
dir ser controlado por una u otra región a lo larFinos, entre los que se pudieron identificar los
go de su vida.
tipos Altar Naranja, variedad Altar (op. cit.: 189Asimismo, al comparar el tipo de planta ar192), Trapiche inciso, variedad Ixpayac (Adams,
quitectónica del conjunto constructivo que com1971: 45) y Tres Naciones Gris, variedad Tres
pone el sitio de Benemérito de las Américas,
15 cm
46
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
A
VII
0
50 m
VI
COURT
IV
V
PLAZA
S
III
T
E
E P
S
LO
I
STELA 2
STELA 1
PE
II
a
S
TE
E P
S
LO
P
E
B
VI
0
50 m
IV
VII
V
I-C
PLAZA
I-A
III
ALTAR
COURT
I-B
elevación natural o extenderse sobre terreno
plano. Este patrón puede apreciarse también
en Bonampak (Tovalín et al., 2002: 85-91) y en
su vecino, el sitio de Nuevo Jalisco (Tovalín et
al., 2004: 55-58) y en cierta manera en Yaxchilán
(García Moll, 2003) y en Dos Caobas (Tovalín
et al., 1998: 80).
Al parecer, varios de los datos aquí presentados reflejan la influencia que pudo tener Yaxchilán en el sitio de Benemérito de las Américas, del cual dista 58 km. Al respecto, hemos
de señalar que existe otro dato interesante sobre esta influencia en la región de estudio, pues
en el sitio de El Palma (Velásquez, 1986: 7-20),
lugar próximo al poblado de Pico de Oro y a sólo 24 km al suroeste de Benemérito de las Américas, se menciona en una de sus estelas a un
personaje de nombre “Escudo Jaguar”, cuyo jeroglífico es idéntico en forma y representación
al que se emplea en Yaxchilán, para referirse al
gobernante Escudo Jaguar II. La referencia posible a este personaje y a su hijo Pájaro Jaguar
en la Estela 2 de Benemérito de las Américas,
II
t Fig. 20 a) Croquis del sitio arqueológico San
Lorenzo; b) croquis del sitio arqueológico Yaxún
(tomado de Bullard, 1965, en García Moll, 1995).
con las reportadas para los sitios vecinos de San
Lorenzo (fig.20a) (Maler, 1995: 42; Bullard,
1995: 49-54), Yaxún (fig. 20b) (Bullard, 1995:
59-64), El Palma (fig. 21) (Velásquez, 1986,
1986: 7-20), Las Pacayas (fig. 22) (Escobedo et
al., 1993: 516; Brady y Rodas, 1994: 539) y El
Tecolote (Golden, Scherer y Muñóz, 2005: 1415; Golden et al., 2005: 3, 9-10), se observa, en
términos generales, que presentan el mismo patrón arquitectónico, el cual está conformado por
una gran plaza delimitada en tres de sus lados
por largas plataformas y el cuarto lado por una
acrópolis o plataforma de mayores dimensiones,
tanto en su ancho como en altura, con respecto
a los demás lados, en donde edificios con techos
de material perecedero debieron coronar las plataformas y la acrópolis. El conjunto arquitectónico puede situarse en la parte alta de alguna
Estelas
0
t Fig. 21 Croquis del sitio arqueológico El Palma
(tomado de Velásquez, 1986).
50 m
47
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
abre la posibilidad de comenzar a conocer la
Lo anterior pudo provocar que el área de Beinfluencia y control territorial de Yaxchilán hanemérito de las Américas, e incluso la parte norcia el sur, ya que el control del Usumacinta río
te de la región de Marqués de Comillas, pudiearriba de Yaxchilán, así como de su importante
ra ser controlada por Yaxchilán, zona de primortributario el Lacantún debió ser de gran impordial importancia, pues por aquella fluye el río
tancia. Una probable frontera debe situarse a
Lacantún, que se une al río Usumacinta a polo largo del río Chixoy y su confluencia con el
cos kilómetros al noreste del sitio de Beneméride La Pasión, que debió ser controlada por Alto de las Américas. Esta importancia reside en
tar de Sacrificios, Ceibal y Dos Pilas a lo largo
el hecho de que la cuenca del río Lacantún es
del periodo Clásico, de hecho existe la referenmuy grande, pues recoge las aguas de varios tricia de un cautivo de Yaxchilán hecho por el gobutarios sobresalientes, entre los que se enbernante 4 de Dos Pilas, K’awiil Chan K’inich
cuentran los ríos Tzendales, San Pedro y Lacanen 745 d.C. (Martin y Grube, 1990: 63).
há, rutas de comunicación por donde debieron
Finalmente, varios autores han hecho procircular mercancías valiosas de los numerosos
puestas sobre la organización política de la reasentamientos de la actual zona sur y zona megión de las tierras bajas mayas del sur. Marcus
dia de la Reserva Integral de la Biosfera de Mon(referido por Mathews, 1997: 288), que con base
tes Azules.
en la presencia de glifos emblema, consideró
Con base en los datos aquí analizados, sugeseis entidades políticas hacia 9.15.0.0.0, entre
rimos como conclusión que el sitio de Benelas que destacan las confederaciones de Yaxchimérito de las Américas debió pertenecer temlán y Ceibal, en donde el sitio de Benemérito
pranamente al área de influencia de Altar de
de las Américas y su área aledaña
quedaría en un punto intermedio
entre ambas entidades. Para Mathews (op. cit.: 308-311), aunque
las fronteras que él propone son
flexibles, no considera que Yaxchilán haya tenido control de la reCueva
gión de estudio, sino Altar de Sacrificios desde el Clásico medio
hasta el tardío, quizá compartiéndolo tardíamente con otras entidades vecinas del Petén guatemalteco, ubicadas un poco al norte
del río de la Pasión y que se conocen como El Chorro e Itzán, y finalmente, después de 9.18.0.0.0
G4
(790 d.C.), hacerlo Aguateca. En
este punto hay controversia, ya
que las recientes investigaciones
en el Petexbatún, han demostraG5
do que hacia 650 d.C., Dos Pilas
se convierte en el sitio más fuerte del área, conquistando a la mayor parte de los grandes asenta0
50 m
mientos del Petexbatún, incluido
Altar de Sacrificios (Martin y Gru- t Fig. 22 Croquis del sitio arqueológico Las Pacayas (tomado de
be, 2000: 55).
Escobedo, Samayoa y Gómez, 1994).
48
ARQUEOLOGÍA
35 enero-abril 2005
Sacrificios y posteriormente a la de Yaxchilán,
con lo cual se comienza a conocer hasta dónde
llegó su control hacia el sur y deja abierta la
puerta para plantearse el papel que también
debieron jugar los múltiples sitios existentes a
lo largo de las riberas de los ríos que componen
la cuenca del Lacantún (Ekholm, 1992: 257259; Ruppert et al., 1995: 4-6).
Sin duda alguna, queda mucho por avanzar
en la investigación de la región para confirmar el posible control que Yaxchilán pudo tener en el Clásico tardío, pues no puede desestimarse que los importantes sitios del Petexbatún
y río de la Pasión también pudieron tener participación en la historia regional, o aun más, que
exista cerca otro u otros sitios de primera magnitud dentro de la cuenca del río Lacantún,
hacia el oeste y sur de los sitios de Benemérito
de las Américas, Yaxún y El Palma, ya que todavía hay grandes extensiones de territorio de los
que se desconoce su riqueza arqueológica en la
Reserva Integral de la Biosfera de Montes Azules y en Marqués de Comillas.
Investigaciones Arqueológicas en Guatemala,
1993, Guatemala, C.A., Museo Nacional de
Arqueología y Etnología, pp. 515-525.
• Ekholm, Susana M.
1992. “Aspectos arqueológicos de la Reserva de la
Biosfera Montes Azules”, en Vázquez-Sánchez,
M.A y M.A. Ramos (eds.), Reserva de la Biosfera
Montes Azules, Selva Lacandona: Investigación para su
conservación, México, Publicación Especial
Ecósfera, 1, pp. 253-265.
• Fournier, Patricia, Alejandro Pastrana, Mario Pérez
y Jorge Quiroz
1987. Bonampak. Aproximación al sitio a través de los
materiales cerámicos y líticos, México, INAH.
• García Moll, Roberto
1976. “Informe de la tercera temporada, 1976.
Yaxchilán, Chiapas”, México, Archivo Técnico de
la Sección de Investigadores del Centro INAH
Chiapas, INAH, mecanoescrito.
2003. Arquitectura de Yaxchilán, México, INAH.
• García Moll, Roberto (coord.)
Bibliografía
• Adams, Richard E.W.
1971. “The Ceramics of Altar de Sacrificios”,
Papers of the Peabody Museum of Archaeology and
Ethnology, vol. 63, núm.1, Harvard University.
• Brady, James E. e Irma Rodas
1994. “Análisis de la naturaleza de los depósitos
ceremoniales en cuevas mayas: investigaciones
recientes en la cueva de los Quetzales”, en VII
Simposio de Investigaciones Arqueológicas en
Guatemala, 1993, Guatemala, C.A., Museo
Nacional de Arqueología y Etnología, pp. 539-552.
• Bullard, Jr. William R.
1995. “Ruinas Ceremoniales mayas en el curso
inferior del río Lacantún, México”, en Roberto
García Moll (coord.), Cuatro estudios sobre el Planchón
de las Figuras, México, INAH (Textos Básicos y
Manuales), pp. 47-66.
1995. “Presentación”, en Cuatro estudios sobre el
Planchón de las Figuras, México, INAH (Textos
Básicos y Manuales), pp. 9-36.
• Golden, Charles, Andrew K. Scherer y A. René Muñoz
2005. “Exploring the Piedras Negras-Yaxchilán
Border Zone: Archaeological Investigations in the
Sierra del Lacandón, 2004”, Mexicon, vol. XXVII,
núm. 1, pp. 11-16.
• Golden, Charles, Edwin Román, René Muñoz, Andrew
Scherer y Luis A. Romero
2005. Reconocimiento y patrones de asentamiento
en la Sierra del Lacandón. Proyecto Regional
Arqueológico Sierra del Lacandón, consultado en
http://www.sierralacandon.org/document/
ReconocimientoyPatrones.pdf.
• Lalo, Gabriel y María de la Luz Aguilar
1996. “El postclásico temprano en Tenám Puente”,
en Quinto Foro de Arqueología de Chiapas,
México, Gobierno de Chiapas-Universidad de
Ciencias y Artes de Chiapas, pp. 23-38.
• Escobedo, Héctor, J. Mario Samayoa y Oswaldo Gómez
1994. “Las Pacayas: un nuevo sitio arqueológico en
la región Petexbatún”, en VII Simposio de
• López, Sandra L.
1989. Análisis y clasificación de la cerámica de un sitio
49
EL SITIO ARQUEOLÓGICO DE LA PRIMERA SECCIÓN DE BENEMÉRITO DE LAS AMÉRICAS, CHIAPAS
maya del Clásico: Yaxchilán, México, Oxford, England
(B.A.R. 535).
exploradas en Bonampak”, Revista de la UNICACH,
cuarta época, julio-diciembre, Chiapas,
Universidad Autónoma de Chiapas, pp. 85-98.
• Maler, Teobert
1995. “San Lorenzo”, en Cuatro estudios sobre el
Planchón de las Figuras, México, INAH (Textos
Básicos y Manuales), pp. 37-46.
• Martin, Simon y Nikolai Grube
2000. Chronicle of the Maya Kings and Queens.
Deciphering the Dynasties of the Ancient Maya, London,
Thames & Hudson.
• Tovalín, Alejandro, Víctor M. Ortiz y Adolfo
Velázquez de León
2004. “Región Norte del Valle del Río Lacanhá,
Chiapas”, Bolom, revista del Centro de
Investigaciones Frans Blom, núm.1, San Cristóbal
de Las Casas, México, Asociación Cultural NaBolom, pp. 55-90.
• Tovalín, Alejandro
• Mathews, Peter L.
1997. La escultura de Bonampak, México, INAH
(Científica, 316).
2004. “Catálogo preliminar de la cerámica de
Lacanhá”, México, Archivo Técnico de la
Coordinación Nacional de Arqueología, INAH,
mecanoescrito.
• Montmollin, Olivier de
1995. Settlement and Politics in Three Maya Polities,
Madison, Wisconsin, Prehistory Press
(Monographs in World Archaeology, núm. 24).
• Ruppert, Karl, J. Eric S. Thompson y Tatiana
Proskouriakoff
1995. Bonampak, Chiapas, México, Washington,
D.C., Carnegie Institution of Washington.
• Valdés, José Antonio, Antonio Foias y Oswaldo Chinchilla
1994. “Tamarindito: un sitio con historia en la
región de Petexbatún”, en VII Simposio de
Investigaciones Arqueológicas en Guatemala, 1993,
Guatemala, C.A., Museo Nacional de Arqueología
y Etnología, pp. 439-452.
• Velásquez, Ricardo
1975. “Ceramics: Excavations at Seibal”, Memoirs
of the Peabody Museum of Archaeology and Ethnology,
vol. 13, núm. 2, Harvard University.
1986. “Localización y reconocimiento de un sitio
arqueológico en la región del Marqués de
Comillas: El Palma, Chiapas”, México,
INAH-Dirección de Monumentos Prehispánicos
(Cuadernos de Trabajo, 2), pp. 7-20.
• Tate, Carolyn E.
• Willey, Gordon, R.A. Ledyard Smith, Gair Tourtellot III
1992. Yaxchilan. The Design of a Maya Ceremonial City,
Austin, University of Texas Press.
y Ian Graham
1975. “Introduction: The Site and its Setting,
Excavations at Seibal”, en Gordon Willey (coord.),
Memoirs of the Peabody Museum of Archaeology and
Ethnology, vol. 13, núm. 1, Harvard University,
pp. 1-51.
• Sabloff, Jeremy A.
• Tovalín, Alejandro y Gabriela Ceja
1996. “Desarrollo arquitectónico del Grupo Norte
de Palenque”, en Merle Greene, Martha Macri y
Jan McHargue (eds.), Eight Palenque Round Table,
1993, The Precolumbian Art Research Institute,
pp. 93-102.
• Tovalín, Alejandro, Peter Mathews, Armando Anaya y
Adolfo Velázquez de León
1998. “Estela 1 o de El Rey del sitio de Dos
Caobas, Chiapas”, Arqueología, núm. 20, México,
INAH, pp. 79-96.
• Tovalín, Alejandro, Adolfo Velázquez de León y
Víctor M. Ortiz
2002. “Estudio de las principales estructuras