Malena Mendizabal habla de la salud de María Valenzuela
Domingo 16 de Octubre de 2016, 08:34
Se conocen hace 14 años, pero están de novios hace dos y medio. En medio del torbellino, Ricky y Malena llegan al Teatro El Pueblo a ver la obra En boca cerrada.–¿Qué le pasó a tu mamá?
–Hace dos meses y medio falleció Gaspar Mulet, su mejor amigo de toda la vida, fue de un momento para el otro. El tenía una enfisema pulmonar, fumaba, estaba tosiendo mucho y, por lo que dicen, se ahogó y bueno… Le hizo muy mal a mi mamá, porque ellos se conocían desde hace cincuenta años y él era como mi tío, era todo. Después de enterarse por una llamada de esa triste noticia, dejó de comer y no quiso salir de la cama. Tuvo un gran bajón, una depresión, como le puede pasar a cualquiera. Fue un golpe espantoso porque mi mamá es hija única, y para ella su amigo era como su hermano.
–Y bajó muchísimo de peso.
–Sí, llegó a pesar 39 kilos, eso es verdad. Nunca la había visto tan flaca y me sorprendió porque no vi el proceso. Como ella vive completamente sola en Luján, con mis hermanos no vimos el día a día. Por suerte, ahora está pesando 46 y está cada vez mejor y comiendo más. Yo veo el cambio.
–¿Está mejor?
–Totalmente. Ella está re bien. Si la ves o hablás, es una persona normal. No está loca ni nada por el estilo, como lo plantean muchos. Leí que están diciendo que está deprimida por falta de trabajo y nada que ver. Ella misma dice que hace muchos años que no recibía tantas ofertas de laburo. Y yo lo vengo aclarando todos los días y al final dicen cualquier cosa.
–En este momento, ¿está internada?
–Sí, está en una clínica de salud mental en la que entró por un cuadro de depresión, pero está con muchas pilas, está saliendo. Hacemos varias salidas afuera porque la psiquiatra nos dijo que es mejor que no se acostumbre a estar siempre en la clínica. Igual estoy segura de que dentro de poco le van a dar el alta porque está muy bien, pero bueno, seguimos esperando, todavía no podemos gritar el gol.
–¿En qué consiste el tratamiento que está haciendo tu mamá?
–No tengo ni idea. Sé que tiene reuniones con la psiquiatra y la psicóloga, y después está mucho en grupo. Además pinta; está pintando todo el tiempo mandalas, le quedan divinos. Ya me regaló tres. “Es terapéutico”, dice y, si a ella le hace bien, a mí me parece bárbaro. Ella jamás pintó y ahora quiere hacerlo. El otro día, súperconvencida me aseguró: “Quiero pintar abstracto”.
–Quizá incorpora un nuevo hobbie. ¿Está planeando más cosas para cuando le den el alta?
–Sí, ya venía trabajando en un proyecto para un hotel boutique de ocho habitaciones en Luján, y ahora le llevaron un libro de teatro para el verano. Es para ser parte de una obra llamada Acaloradas con Graciela Alfano, Mimí Ardú y Mex Urtizberea. Lo importante es que está retomando sus actividades y saliendo de esto. Lo que quiero que quede claro es que mi mamá está con pilas, no está tirada en una cama. En su momento lo estuvo y por eso ella misma tomó la decisión de internarse. Porque también estoy escuchando que dicen que yo le dije: “Mamá, esto no da para más”. ¡Y es mentira! Mi mamá fue la que me dijo “Malena, me voy a internar” y yo le respondí “Me parece perfecto porque si no te vas a morir, no podés pesar 39 kilos”. Pero bueno, cuentan lo que quieren.
–¿Te veías venir su decisión?
–Y sí, porque desde que falleció Gaspar el cambio fue rotundo.
–¿Ella está al tanto de la repercusión que está teniendo en los medios?
–Sí. Obviamente no tiene su celular con ella, porque no puede tenerlo, pero yo lo agarro cada tanto para ver qué novedades hay y cada vez que lo prendo tiene, fácil, cien mensajes. La gente la re quiere y ella lo sabe.
–Ahora estás entrando al teatro, pero ¿estás yendo seguido a la clínica?
–Obvio, todo el tiempo. A mamá la voy a acompañar siempre.
Fuente: http://www.gente.com.ar/actualidad/malena-mendizabal-habla-de-la-salud-de-mara-a-valenzuela/23709.html
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