San Luis y su gente: Fraga cumple hoy 109 años

El pueblo que tiene el nombre de un coronel uruguayo caído bajo las balas paraguayas en la Batalla de Curupaity, Fraga, cumple hoy 109 años de vida.

Es una localidad del Departamento Pringles y está ubicada a la altura del kilómetro 730 de la Autopista de las Serranías Puntanas, a 55 kilómetros de la capital puntana y a 35 de Villa Mercedes. Era  conocido como Las Piedritas, y después como Fortín Las Piedritas  o Fortín Fraga, guarnecido por el Batallón Tres de Línea bajo el mando del capitán de  Cazadores, Antonio Pardo, según la historia.

El pueblo fue bautizado con ese nombre, en claro homenaje al coronel Manuel del Tránsito Fraga, destacado militar del Ejército Argentino que murió el 22 de setiembre de 1866. Fraga había combatido en Yatay, Uruguayana, Paso de la Patria, Estero Bellaco, Tuyuty y Yatayti Cora. También había participado de las batallas de Pavón y Cepeda según se desprende de la historia, el fortín estaba emplazado entre Paso del Molle y Paso de las Piedritas, y era el último bastión civilizado de la zona oeste.

El  Fortín de Las Piedritas era un simple rancho de dos aguas, con paredes de quincha y techos de paja asentada en barro, con su frente a campo abierto, sin otra ventaja que la de mantener despejado el horizonte.

Finalmente y después de años, el pueblo fue fundado el 5 de mayo de 1906 por el gobernador Benigno Rodríguez Jurado, quien firmó el decreto que declaró "formado el pueblo".

La localidad tuvo dos asentamientos. El primero fue en 1880 cuando llegó el ferrocarril, posteriormente entre 1881 y 1886, construyeron la estación de trenes, andenes y se colocaron los tanques de agua para las vaporeras.

Con el arribo del tren, llegó el progreso, instalaron comercios Blas Antola, Ernesto Panini, Amadeo Pedranzani, Hernán Jhonson, José Ali y José Staurini. En 1913, el subcomisario Andrés Rodríguez le compró una propiedad a don José Panza y comenzó a construir un hotel que abrió sus puertas en agosto de 1924. Era amplio y lujoso, su interior fue decorado por un pintor chileno. Durante años, fue el sitio preferido de quienes visitaban Fraga.

El otro movimiento habitacional fue cuando se trazó la ex ruta nacional 7 y el pueblo se trasladó a su actual emplazamiento. La primera capilla católica, fundada en 1900 en la zona sur del pueblo, fue destruida por vándalos. En 1966 se creó la nueva casa religiosa  en honor a la patrona, la Virgen Señora del Rosario. El 20 de mayo de  1909, quedó inaugurada la Escuela Nacional Nº 44, el acto fue presidido por Brenilda Lucero Aberastain. Tenía 37 alumnos y en 1937 asume en la dirección Rafaela Cornejo.

Según los registros, los primeros vecinos fueron:  José María Magallanes. Valentín Cabrera, Francisco Plácido Gil, José Pesce, José Mercado, Pedro Lucero, Bartolo y Miguel Bravo y doña Eugenia de Lucero, entre otros.

Dice la historia que el primer comisionado municipal fue don Santiago Guyer, que al poco tiempo renunció siendo reemplazado por Constantino Rinaudo.

En 1913, el gobierno vende los primeros terrenos en Fraga, a Crespín Pandolfi, a la maestra Brenilda Lucero, Antonio Tarizzo, Bautista Vacotto que instala una panadería y a Hilario David.

La localidad es hoy un pueblo dedicado a la agricultura y ganadería, que en los años de la radicación industrial supo capitalizar el envión y tuvo la suerte de que la empresa Orbis instalara su base de operaciones allí. Así se convirtió en el principal sostén de muchos de los hogares que tiene el pueblo gobernado por el justicialista Juan Alberto Gil.

“En 1985 la localidad tenía 180 habitantes, hoy y de acuerdo al último censo, somos 1.200 habitantes", dice el intendente y agrega: "Fuimos creciendo porque en la localidad se instaló la fábrica de calefones y calefactores que en un principio le daba trabajo a unos 20 operarios, todos de Fraga que llegaban hasta a caballo. En esto, debemos agradecerle al gobernador Adolfo Rodríguez Saá, al ministro Eduardo 'El Gaucho' Endeiza y a Pedro Risma que trabajaron para que el pueblo siguiera viviendo”.

Gil recuerda que muchos de los empleados no sabían leer ni escribir y que eso generaba un grave problema por lo que la gerencia de la empresa, encabezada por su propietario Federico Mertig, aplicó dentro del establecimiento un plan nacional de educación: después de almorzar había que estudiar. "Hoy la empresa tiene más de 280 empleados, de los cuales el 95% son del pueblo. Se ha dado el caso que allí trabajan nietos de aquéllos que fueron los primeros operarios”, expresa.

La radicación industrial en Fraga permitió cambiar y mejorar la calidad de vida. Ya no hubo más éxodo de la juventud y permitió el crecimiento de todos. “Yo personalmente jamás hubiera soñado vivir esta realidad”, comenta Gil.

“Hoy la escuela 'Urbano J. Núñez' tiene los tres niveles, y muchos jóvenes de la zona rural estudian en Fraga, por lo que estamos necesitando un medio de movilidad, ya veremos cómo lo conseguimos”, cuenta.

Fraga fue cambiando de a poco, porque mediante los planes habitacionales del Gobierno se construyeron 120 casas y en poco tiempo comenzará la construcción de otro barrio. “Ya tenemos las calles abiertas que llevarán el nombre de Sor Catalina Cavallera, la primera y única monja del pueblo, Eduardo Endeiza, Hugo Becerra y Victoria Gutiérrez, una vecina querida por todos que oficiaba de partera”, anticipa.

En la faz deportiva, el Club Sportivo Fraga participó en los campeonatos de fútbol de la Liga Sanluiseña, pero para los fraguenses el fuerte son las bochas. La institución tiene en la actualidad dos canchas de piso sintético y techadas que son el orgullo de San Luis.

En 2009 se hizo el campeonato argentino juvenil donde jugaron Maicol Sánchez, el técnico Norberto Cavallera de Fraga y los villamercedinos Luciano Carrasco y Michael Aguilar.

En 2011, el Sudamericano tuvo entre los jugadores de la Selección Argentina a Bruno Villegas, también de la localidad. "Fue una actividad que se pudo cumplir ‑aclara‑ con el apoyo incondicional del por entonces gobernador Alberto Rodríguez Saá. Un verdadero orgullo para San Luis, porque a nuestro pueblo lo vio el país y buena parte de Sudamérica, todo por el deporte".

Otro motivo de orgullo del pueblo es el predio de doma “Los Troperos de Fraga”, de cuatro hectáreas, con quinchos, corrales, luz eléctrica y un parque autóctono que asombra. Allí culminarán el domingo los festejos del 109º Aniversario.

La figura de don Juan fue creciendo en popularidad y la gente se lo manifiesta continuamente y a cada paso cuando recorre las calles de su pueblo. “Adiós don Juan!!”, “cómo le va…”, "¡Grande viejo!", suena por otro lado. Todo es parte del folclore del pueblo que hace 30 años vivía uno de sus peores momentos, sin fuentes de trabajo, sin escuelas y sin gente, sólo era un lugar de paso.

Un problema de salud minó un poco las fuerzas de don Juan, pero no su ánimo y continúa poniéndole empuje a todo. “La salud era para nosotros otro punto a solucionar, felizmente tenemos un hospital de día y salas de internación. A las parturientas las trasladamos a Villa Mercedes en ambulancia para su atención y los médicos están a disposición del pueblo y de la zona rural”, acentúa.

El tiempo fue pasando y Fraga creciendo. Para contener los jóvenes y su hábitat de vida natural, el Municipio inauguró una pileta de natación que cuenta con quinchos, parque y churrasqueras.

También se compraron cinco hectáreas sobre la costa del río Quinto para hacer un balneario, donde se han instalado quinchos y baños. “Es un lugar muy lindo que está a siete kilómetros de Fraga, con el tiempo servirá para atraer al turismo”, señala.

Para hoy está prevista la inauguración de un arco identificatorio a un costado de la plaza Los Inmigrantes, reformas en el espacio verde (luces, bancos y parquización) y la colocación de un busto en homenaje a Juan Pascual Pringles. En tanto frente al Club Sportivo, se habilitará una plaza saludable.

En materia de obras públicas, Fraga está esperando la instalación de la red de gas natural, también una rotonda sobre la Autopista de las Serranías Puntanas y la nueva terminal de ómnibus para la cual la Intendencia ya compró el terreno. “Esas obras permitirán el ingreso y egreso al pueblo de manera correcta y el tránsito tendrá una circulación acorde con la actualidad”. Expresa el intendente apostando a que quien lo suceda, continúe con el plan municipal trazado.

Gil asegura que el proyecto está casi listo y aprobado por el Ente Control de Rutas, Vialidad Nacional y el Gobierno de la Provincia.

* Datos aportados por el profesor Héctor Valentín Zill, y la Historia de la Provincia de San Luis.