Con el objetivo de explorar estrategias prácticas para promover la paz en el hogar y en la sociedad, el Colegio Teresiano América Haras impartió en sus instalaciones, el taller Educación para la Paz, centrado en el tema la "Paz Creativa", el cual brindó una experiencia transformadora para los padres de familia y alumnos, abordando temas más amplios, como la justicia social y la inclusión.
En dicho seminario, el aspecto más destacado fue su enfoque en la creatividad como herramienta para la construcción de la paz, y donde los especialistas que guiaron este taller, enseñaron a los participantes a explorar nuevas formas de abordar los conflictos y las tensiones, no solo en el ámbito familiar, sino también en la sociedad en general; a través de actividades prácticas, como el arte terapia, la narración de historias y la improvisación teatral, los padres descubrieron cómo pueden cultivar un ambiente de armonía y comprensión en sus hogares.
En estos tiempos donde unos de los principales problemas a nivel global es el aumento en los índices de violencia, fue interesante ver como los alumnos del colegio Teresiano América Haras, al frente de su directora, la madre Lucila Martínez González, se interesaron sobre manera en aprender de estos talleres, al igual que todos los padres de familia participantes, creando así un ambiente de apertura y reflexión.
Un punto importante en este curso, fue cuando los participantes se sintieron seguros y en confianza para compartir sus experiencias derivadas de preocupaciones o intranquilidades, todo ello gracias al trabajo de empatía que tuvieron los especialistas para abordar estos temas, estableciendo un sentido de comunidad y apoyo mutuo.
En resumen, los padres de familia, ejes principales en la educación de los niños, fueron inducidos a reflexionar sobre su papel en la creación de un mundo más equitativo y tolerante para las generaciones futuras, y como adultos, que sean agentes de cambio en sus familias y comunidades. Un recordatorio poderoso de que la paz no es solo la ausencia de conflicto, sino un compromiso activo con la compasión, la empatía y la justicia.