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La Selva de Mar

Genuino Empordà

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Más allá del tópico que identifica el Empordà con la Costa Brava, hay un territorio ajeno al sol y playa, orgulloso de un patrimonio y una historia propia y genuina. Es el caso de Selva de Mar, pueblo bellísimo situado a dos kilómetros de Port de la Selva, que antiguamente formó parte del municipio, y que está situado en el interior de la península del Cap de Creus. A poca distancia se encuentra también el parque natural homónimo y el reconocido Monasterio de Sant Pere de Rodes.

Edificios populares construidos con pizarra de la zona, puentes para cruzar el riachuelo, espacios encantadores como el de la Fuente dels Lledoners e, incluso, un antiguo lavadero público son elementos que configuran un núcleo urbano en el que aún quedan restos de las antiguas murallas, elementos defensivos para proteger la población de los ataques piratas.

La Iglesia de Sant Sebastià (siglos XII y XIII) es un templo románico que fue fortificado posteriormente y que se encuentra en las afueras de la población. En el casco urbano destaca la Iglesia de Sant Esteve (siglo XVIII), destruida en 1939 al explotar el material bélico que había dentro de la iglesia y reconstruida posteriormente.

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