Sociedad

Fuensaldaña (Valladolid) regresa al medievo y homenajea al hispanista Edward Cooper

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, destaca que el proyecto pretende "dar vida a los pueblos" y llenar de actividades los castillos

El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, visita el mercado medieval de Fuensaldaña
El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, visita el mercado medieval de FuensaldañaDiputación de ValladolidDiputación de Valladolid

La localidad vallisoletana de Fuensaldaña regresa, este fin de semana a la Edad Media, con la celebración del primer Mercado Medieval, un evento que, durante todo el fin de semana, sirve para que vecinos y visitantes luzcan ropajes de época, realicen talleres de todo tipo de oficios de la época en la que se edificó el castillo y conozcan este último, así como el legado que el historiador hispanista británico Edward Cooper dejó bajo la salvaguarda de la Diputación de Valladolid y que ahora se aloja en Fuensaldaña.

Pasadas las 11.00 de la mañana de este sábado 6 de abril, se dio por iniciado un mercado que ya desde minutos antes contó con decenas de interesados por conocer los oficios de esta época, diseminados por una quincena de puestos repartidos por la explanada exterior del castillo, y también el propio monumento por dentro.

Las visitas guiadas, en este fin de semana tan especial, no serán al uso, sino que una lavandera del siglo XV, de nombre Pepa, es la encargada de mostrar el interior del lugar que hasta hace apenas dos décadas albergaba las Cortes de Castilla y León y que hoy familias de ciudadanos locales y visitantes pueden conocer a través de un recorrido donde “se encienden los cinco sentidos”.

A la vez, una concentración de motocicletas Vespa daba sonido al Mercado, mientras los más pequeños podían disfrutar no solo del conocimiento que ofrecían los puestos de oficios tan dispares como la alfarería, el tejido, la realización de instrumentos de percusión, el diseño y ejecución de cotas de malla, cascos y armaduras o la escritura y el dibujo medieval. Todo aderezado de vino de la Denominación de Origen Cigales para los más mayores y de una noria medieval y castillos hinchables para los menores.

La jornada contó con la visita del presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, que recordó que el Mercado Medieval se engloba en el quinto año de un proyecto de visibilidad para los castillos de la provincia que busca “dar vida a los pueblos” y llenarlos de actividades que, como en el caso de la de este fin de semana en Fuensaldaña, sirven también para agradecer el trabajo y el legado que dejó al respecto el historiador hispanista Edward Cooper.

Asimismo, mencionó el Plan de Sostenibilidad Turística aprobado el jueves por el Consejo de Gobierno de la Junta, que dará “una inyección más a una provincia que es de las que más castillos visitables tiene” y que, por tanto, se beneficiará de buena parte de las ayudas, dotadas con más de dos millones de euros del Gobierno autonómico, para “apostar por el patrimonio y defender el turismo”.

Por su parte, la alcaldesa de Fuensaldaña, Pilar Peña, destacó las posibilidades que surgen de la iniciativa del Mercado Medieval para “atraer más turismo, empezar a organizar eventos con la Diputación y dar una mayor vida al castillo”. Y es que, durante el fin de semana, se espera que por Fuensaldaña y su Mercado Medieval pasen entre 3.000 y 4.000 personas.