La construcción del puente sobre el Río Esteban, una parte esencial de la carretera Santa Fe-Balfate, también conocida como “Corredor Esmeralda”, sigue avanzando a paso firme.
Este avance no solo representa una mejora en la infraestructura vial, sino también la conexión de comunidades históricamente aisladas.
Los habitantes de Plan Grande, Quinito, Manati y otras localidades que durante más de dos siglos han dependido principalmente de la vía marítima para su comunicación con Trujillo y el resto de Honduras y el mundo, ven con esperanza la posibilidad de un futuro más conectado gracias a este puente.